El Sumo pontifice de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, volvió a dejar el Vaticano para visitar un albergue de mujeres.
Las madres que habitan la “Casa de Leda”, en otrora una casa del crimen organizado y que fue confiscada para dar albergue a mujeres detenidas y a sus hijos, fueron sorprendidas por la visita del Papa Francisco, quien no se cansa de hacer su obra fuera de los muros del palacio vaticano.
Continuando con los “Viernes de la Misericordia”, que el Papa inició durante el Jubileo de la Misericordia de 2016, Francisco abandonó el Vaticano a las 4:00 p.m. (hora de Roma) acompañado de Mons. Rino Fisichella, Presidente del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización.
#ViernesDeLaMisericordia: "Casa de Leda" es la primera que existe en Italia y su responsable Lillo Di Mauro, habló con @Pontifex_es sobre la importancia de restituir a la sociedad un espacio donde se pueda desarrollar un proyecto de gran humanidad. 📸@vaticannews_es pic.twitter.com/WEIXV7cZkr
— ACI Prensa (@aciprensa) March 2, 2018