El papa Francisco arribó al Castillo de Gandolfo para almorzar en forma privada con su predecesor, Benedicto, el Papa Emérito.
Es la primera ocasión en al menos 600 años en la que dos Pontífices se reúnen cara a cara.
Desde su elección el papa Francisco ha charlado con el ex Papa por teléfono, quien vió la misa de entronización por televisión.
El previo Pontífice vive en la residencia de retiro papal desde que renunciara el mes pasado.
Vía BBC Mundo