Cientos de familiares, amigos y admiradores recibieron en el Centro de Convenciones de Ponce la llegada del féretro del salsero y bolerista puertorriqueño Cheo Feliciano, quien fue enterrado ayer en su ciudad natal, en el sur de Puerto Rico.
Con camisetas alusivas al cantante, fallecido el pasado jueves en un accidente de tránsito a los 78 años, y carteles con mensajes que prometen eterno recuerdo para uno de los grandes de la salsa, cientos de personas llevaban aguardando este momento desde primera hora de la mañana tanto en el centro de convenciones como en la carretera a la entrada de la ciudad.
La comitiva con los restos del legendario intérprete de temas como Anacaona,Amada mía y El ratón, partió muy temprano desde San Juan, donde el cadáver fue velado por dos días en el coliseo Roberto Clemente de aquella ciudad, al que acudieron durante todo el fin de semana miles de personas.
La llegada del féretro al Centro de Convenciones de Ponce fue celebrada por un grupo de músicos, que le dedicó un coro de plena, uno de los más importantes géneros musicales autóctonos de Puerto Rico. El coro decía: «Salomé, Anacaona, yo llego a Ponce, ahora tu pueblo no llora».
La alcaldesa de Ponce, María «Mayita» Meléndez, colocó sobre el féretro las banderas de Puerto Rico y la de Ponce, la segunda ciudad de la isla en antigüedad y tamaño, a unos 120 kilómetros de San Juan.
Entre quienes recibieron el féretro en su ciudad natal se encontraban también las decenas de personas que llegaron en autobuses fletados por Hogares Crea, institución que ayuda a la rehabilitación y tratamiento de adicciones y a la que Feliciano recurrió en su día para superar la dependencia de la heroína en la que cayó cuando vivía en Nueva York.
La Centenaria Banda Municipal de Ponce y la Coral Municipal estuvieron encargadas de amenizar las horas en que el cadáver estuvo expuesto en el centro ponceño de convenciones.
De allí el féretro fue llevado hasta el cementerio de La Piedad, después de atravesar Ponce por el centro y pasando frente a la calle donde residió.
Fue enterrado durante la tarde de este lunes, que por cierto fue festivo en Puerto Rico en memoria del escritor y político José de Diego.
Durante el sábado y el domingo, el cadáver del cantante fue expuesto también y grandes figuras de la salsa acudieron a despedirlo.
Así, por el recinto pasaron artistas de la talla de Rubén Blades, Gilberto Santa Rosa, Luis Enrique, Tito Nieves, Ismael Miranda, Andy Montañez, Domingo Quiñones y el venezolano Oscar D’ León.
El Universal/www.diariorepublica.com