Durante la mañana de este jueves dos protesta tuvieron lugar en la Costa Oriental de Falcón; ambas buscaban llamar la atención de las autoridades, locales y nacionales, en pro de solventar las fallas que denuncia tanto en materia de seguridad como en las inspecciones a comercios locales.
En el poblado de Tucacas el comercio bajó sus santamarías durante toda la mañana del jueves. María Angélica Flores Carvelli, vicepresidenta de la Cámara de Comercio de Tucacas, explicó que la decisión de protestar se originó tras la reciente retención «irregular» de mercancía seca.
«No queremos politizar el problema, queremos trabajar en paz» sentenció Flores, dejando saber que por lo menos a tres comerciantes de la zona se les retuvo su mercancía, la que fue trasladada a la ciudad de Coro.
Según el gremio comercial de Tucacas, cerca del 80% de la zona de ventas no prestó servicio la mañana de este jueves. En Tucacas existen por lo menos 350 comerciantes formales, 250 de ellos afiliados a Fedecámaras.
En una reunión, los comerciantes pidieron a representantes de la Alcaldía interceder ante la Gobernación de Falcón y el Sundee para lograr que, en lugar de fiscalizaciones con retención de mercancía, se inicie una etapa informativa que les permita al comercio «ponerse a derecho, así lo ha hecho el Seniat y nosotros nos hemos adecuado» afirmó Flores.
Además de los comerciantes en Tucacas, en el poblado de Sanare los conductores de al menos tres líneas de transporte público, de la ruta Morón-Coro, protestaron por el asesinato del conductor Juan Jiménez (35), quien murió al recibir un balazo por oponerse a ser atracado mientras cumplía su labor. Los pasajeros golpearon al ladrón, quien falleció posteriormente producto de la golpiza.
La acción de protesta de los conductores se extendió por al menos tres horas y provocó afectaciones a más de 300 pasajeros (tanto de Morón como de Tucacas) quienes no contaron con servicio de traslado durante toda la mañana del jueves.
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