La penectomía es la eliminación del pene para tratar el cáncer de pene, un tipo de cáncer no muy frecuente pero con mayor incidencia en países de América del Sur, África y partes de Asia. Cuando es necesaria una cirugía, se realiza una penectomía parcial o completa para eliminar el cáncer y mejorar las posibilidades de supervivencia del paciente.
Si el cáncer está muy extendido en el tejido, la penectomía implicará la eliminación completa del pene junto a las raíces del mismo, que se extienden en la pelvis. Aunque no afecta a la capacidad para orinar, sí a cómo esta sale del organismo, pues hay que crear una nueva abertura entre el ano y el escroto para que la orina pueda ser expulsada.
Asimismo, dependiendo de lo avanzado que esté el cáncer, es posible que sea necesario extirpar también los testículos, en cuyo caso es preciso tomar suplementos de testosterona posteriormente.
Recuperación tras la cirugía
El proceso de recuperación tras una penectomía depende de muchos factores, incluyendo la edad del hombre, la extensión del cáncer y cualquier otra condición médica que esté presente.
Los efectos a largo plazo del procedimiento quirúrgico pueden incluir cambios en la forma en que el hombre orina, dependiendo de si se realizó una penectomía parcial o completa.
En el caso de una penectomía parcial, la micción tradicional de pie es posible. Pero ante una penectomía completa, el hombre tendrá que sentarse para hacer pis.
Respecto a la función sexual también puede verse afectada. Sí que es posible mantener relaciones sexuales con una penectomía parcial; sin embargo, ante una cirugía completa, la penetración no lo es, según la Sociedad Americana del Cáncer.
Vía Globovisión/www.diariorepublica.com