La llama olímpica llegó en barco este miércoles a Río de Janeiro, donde fue recibida por bailarines de samba, multitudes sonrientes y pequeñas protestas a dos días de la apertura de los Juegos Olímpicos.
Después de recorrer más de 300 pueblos y ciudades, la llama pasó a manos de los héroes olímpicos brasileños de la navegación a vela Lars y Torben Grael, que cruzaron en barco la Bahía de Guanabara desde la vecina Niteroi y llegaron a una academia naval en Rio.
El alcalde, Eduardo Paes, fue el primero en recibir en la ciudad de Rio la llama que ardía en una pequeña lámpara, y encendió la antorcha.
Bailarines y músicos de las más famosas escuelas de samba convirtieron el paso de la antorcha en una fiesta callejera.
“Larga vida a los Juegos Olímpicos y bienvenida la llama olímpica a la ciudad más bella e increíble de todas, el amor de mi vida, Rio de Janeiro”, clamó Paes.
La antorcha después comenzó a pasar de mano en mano en una ruta a través del centro de la ciudad, en un recorrido antes de que llegue al estadio Maracaná el viernes de noche cuando se encienda la pira en la ceremonia de apertura.
Vía UN/www.diariorepublica.com