Las remuneraciones de los trabajadores industriales en Venezuela han experimentado un crecimiento significativo en los últimos cuatro años, con un aumento promedio del 183% en sus salarios dolarizados. Sin embargo, a pesar de este incremento, los datos del segundo trimestre de 2024 revelan que el poder adquisitivo sigue siendo un desafío, ya que solo los cargos gerenciales perciben ingresos suficientes para cubrir el costo de la canasta alimentaria.
Remuneraciones por tamaño de industria
El informe muestra una clara brecha salarial por el tamaño de las empresas, con la gran industria ofreciendo los sueldos más altos en todas las categorías:
Obreros y operarios: El salario promedio fue de $223 en la pequeña industria (16,75% de aumento interanual), $228 en la mediana (19,37% de aumento) y $319 en la gran industria (13,52% de aumento).
Profesionales y técnicos: Las remuneraciones promediaron $444 en la pequeña industria (13,27% de aumento), $524 en la mediana (11,96% de aumento) y $656 en la gran industria (27,58% de aumento).
Gerentes: Los cargos gerenciales registraron un promedio de $988 en la pequeña industria (25,70% de aumento), $1.105 en la mediana (0,18% de aumento) y $1.372 en la gran industria (22,72% de aumento).
Desafíos y perspectivas
Los datos destacan que la industria mediana registró los menores incrementos salariales, especialmente para los gerentes, cuya remuneración se estancó con un aumento de solo 0,18%.
A pesar de los aumentos, la capacidad de compra sigue siendo una preocupación. Con el costo de la canasta alimentaria en $543 en julio, el informe concluye que solo los gerentes de las medianas y grandes empresas tienen ingresos suficientes para cubrir esta necesidad básica. El resto de los trabajadores, incluyendo profesionales y técnicos, aún se enfrentan a un déficit significativo.
«El sector industrial ha hecho un esfuerzo por ajustar las remuneraciones en respuesta a la dolarización de los precios,» señala el informe. «Sin embargo, la alta presión tributaria y la falta de financiamiento siguen limitando la capacidad de las empresas para ofrecer salarios competitivos que realmente recuperen el poder adquisitivo de sus empleados.»
Vía Foco Informativo/Diario República.com
