El presidente de la República, Nicolás Maduro, enfatizó este jueves la necesidad de una ruta de estabilidad y crecimiento totalmente autónoma para Venezuela, desvinculada de cualquier influencia o injerencia externa, particularmente de Estados Unidos.
Durante una jornada de trabajo en la Comuna Rural Turística Parque Caiza, el jefe de Estado fue contundente al afirmar:
«La paz de Venezuela no puede depender de lo que escriban, declaren y digan los gringos.»
Autonomía económica: El camino de la inteligencia colectiva
El mandatario nacional destacó que el camino hacia la prosperidad y la estabilidad ha sido definido por los propios venezolanos. En el ámbito económico, instó a la autosuficiencia productiva como pilar fundamental:
Ruta definida: La nación debe fortalecer de forma autónoma el camino que ya ha trazado.
Independencia económica: La prosperidad económica y el crecimiento de los «13 motores» no deben depender del extranjero.
Capacidad nacional: El futuro económico debe sustentarse en «la inteligencia y de la capacidad productiva de los venezolanos».
«El camino lo encontramos, ahora hay que abonarlo y fortalecerlo… debe depender de la inteligencia y de la capacidad productiva de los venezolanos», sentenció.
La «Democracia verdadera» venezolana
En el plano político, el presidente Maduro defendió el modelo de gobierno nacional, asegurando que Venezuela está respaldada por una «democracia verdadera», que no busca imitar a ningún otro modelo global.
El líder del Ejecutivo describió este sistema como:
Renaciente y ejemplar: Una «democracia ejemplar de ciclo completo».
Directa y con el pueblo: «Una democracia directa, una democracia con pueblo, desde el pueblo y para el pueblo.»
«La democracia nueva no puede imitar ningún modelo en el mundo… La democracia verdadera es la venezolana», refirió.
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