“Siendo sincera, quiero vender mi virginidad porque quiero viajar por el mundo y quizás después formar mi propio negocio”, dijo ante la cámara la joven antes de la subasta.
Los medios internacionales no dejaron pasar la noticia. Es que no solo ha sido una sola, sino que varias féminas que han subastado su virginidad al mejor postor. Hace algunos días, un nuevo caso se tomó las portadas de los diferentes diarios del mundo: Jasmin, una chica de 26 años, vendió su virginidad en 1,5 millones de dólares.
Nicole de 18 años, Gisselle de 19, Raisa de 25 y Jasmin de 26 son cuatro chicas que no solo comparten la juventud: todas ellas decidieron poner en venta su virginidad. Por este motivo quisimos entender el trasfondo de este nuevo “negocio” y la percepción de los jóvenes en torno a su “primera vez”.
La virginidad como subasta
Jasmin es británica, tiene 26 años, le encanta viajar, leer y ver películas. Su comida favorita es la japonesa y sus perfumes favoritos son de Gucci y Versace. Esas son algunas de las características en su perfil en Cinderella Escorts, donde la joven vendió su virginidad a 1,5 millones de dólares.
Según el portal de escorts que publicó la oferta, un actor de Hollywood pagó la enorme suma de dinero por una noche con esta chica virgen. El nombre del actor ha permanecido anónimo hasta ahora.
La virginidad como subasta se ha hecho popular en las redes sociales. La gran mayoría de las veces, algunos lo hacen para pagar sus estudios universitarios, para ayudar a sus familias o tener solvencia económica, pero ¿por qué vender el primer coito se ha vuelto tan común? Esto es lo que piensan algunos especialistas.
Agencias