De momento, se desconocen las causas, aunque las investigaciones preliminares apuntan a que se pudo tratar de una negligencia al encender una llama en una sala con polvo altamente inflamable, según indicó la agencia oficial Xinhua.
La Policía ya ha detenido por la explosión a dos altos ejecutivos de la firma dueña de la planta metalúrgica, Kunshan Zhongrong Metal Products, una empresa de inversión taiwanesa y que, según indica en su página web, cuenta con 450 trabajadores y trabaja para firmas como General Motors y otras compañías estadounidenses.
El presidente chino, Xi Jinping, ha enviado un grupo de emergencia del Consejo de Estado -Ejecutivo chino- a la zona del suceso encabezado por el consejero Wang Yong, quien se encargará de dirigir la investigación.
Unos cuarenta cuerpos fueron encontrados carbonizados en el interior de la fábrica, mientras que más de una veintena de víctimas murieron en los hospitales a los que fueron trasladados.
La mayoría de ellos, son hombres jóvenes, de unos veinte
años, según informó el oficial Diario del Pueblo.
Vía ÚN / www.diariorepublica.com