El presidente de la República de Ecuador Daniel Noboa, ante las acusaciones de entrega de soberanía defendió enérgicamente su propuesta de permitir la instalación de bases extranjeras en territorio ecuatoriano, asegurando que estos emplazamientos son una herramienta estratégica clave para la seguridad nacional y la lucha contra el crimen organizado y los delitos ambientales.
En una entrevista radiofónica reciente, el mandatario buscó disipar las críticas que denuncian una «entrega de soberanía» o la creación de «bases militares» en sentido estricto.
Clarificación de la naturaleza: Noboa enfatizó que no se trata de «bases militares» con la connotación tradicional, sino de «espacios estratégicos» destinados a mejorar la capacidad de control del Estado ecuatoriano.
Enfoque en deguridad y smbiente: El presidente destacó que el objetivo principal es reforzar la seguridad fronteriza y, crucialmente, el control ambiental, sugiriendo una colaboración directa en la vigilancia de recursos naturales y la lucha contra la minería ilegal.
Aseguramiento de la Soberanía: En respuesta a sus críticos, el Jefe de Estado garantizó que «estos acuerdos se regirán estrictamente bajo las leyes nacionales y estarán bajo el control del Gobierno», reafirmando que no habrá cesión de soberanía.
El Ejecutivo busca con esta estrategia fortalecer los mecanismos de cooperación internacional para combatir amenazas transnacionales, mientras mantiene el control y la jurisdicción total sobre los espacios acordados.
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