El Papa Francisco recibió la mañana del martes a la selección argentina de fútbol, encabezado por Lionel Messi, en una audiencia privada en El Vaticano.
La audiencia, en la que también participó la selección italiana, se produjo en el marco del partido amistoso que ambos equipos jugarán mañana en el estadio Olímpico de Roma, en homenaje al sumo pontífice.
Ante directivos y jugadores de ambos países, el excardenal de Buenos Aires les pidió que eliminen toda muestra de «discriminación» de los estadios.
Además abogó porque el fútbol nunca pierda su carácter deportivo, a pesar de que se haya convertido en un negocio.
«Será un poco difícil para mí animar a una o a otra (selección mañana), pero por suerte es un amistoso», les dijo el pontífice a las dos delegaciones en la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano.
Además, hizo un llamado a los jugadores a llevar con responsabilidad su liderazgo social. «(Ustedes) son muy populares, la gente los sigue mucho, no sólo cuando están sobre el terreno de juego, sino también fuera.
Es una responsabilidad social», agregó el Papa, quien les pidió que, aunque sean «personajes» conocidos, no pierdan nunca su condición de «hombres portadores de humanidad».
La reunión se realizó a las 11 am hora local y duró alrededor de 15 minutos.El papa, reconocido aficionado del fútbol e hincha del club San Lorenzo en Argentina, saludó a los jugadores y se tomó fotos con ellos al final de la reunión.
Vía BBC