
La Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) ha dado un paso extraordinario al emitir un ‘mensaje especial’ condenando la política de deportaciones y la estigmatización de los inmigrantes por parte del gobierno del presidente Donald Trump. Aunque la declaración, aprobada casi por unanimidad este miércoles 12 de noviembre en su conferencia anual en Baltimore, evita nombrar directamente al mandatario, su crítica a la retórica antiinmigrante de la Casa Blanca es inequívoca.
La declaración, que marca la primera vez en 12 años que la USCCB recurre a este tipo de pronunciamiento especial, refleja una profunda preocupación dentro de la Iglesia.
😥 Clima de Temor y Ansiedad
Los obispos expresaron su consternación por el ambiente social y la aplicación de las leyes migratorias.
“Nos preocupa profundamente observar entre nuestro pueblo un clima de temor y ansiedad en torno a la discriminación racial y la aplicación de las leyes de inmigración”, dice la declaración.
El mensaje fue contundente al señalar los efectos de la política de «mano dura»:
Estigmatización: «Nos entristece el estado del debate actual y la estigmatización de los inmigrantes.»
Detención: «Nos inquietan las condiciones en los centros de detención y la falta de acceso a la atención pastoral.»
Separación Familiar: «Nos duele ver a padres que temen ser detenidos al llevar a sus hijos a la escuela y consolar a familiares que ya han sido separados de sus seres queridos.»
La USCCB también expresó su preocupación por las «amenazas» de posibles redadas migratorias en lugares de culto, hospitales y escuelas.
🌐 Llamada a la Contribución Migratoria y el Diálogo
La declaración enfatizó la “enorme contribución” de los inmigrantes al bienestar de Estados Unidos y abogó por establecer vías seguras y legales para aquellos que buscan una vida mejor.
El mensaje fue aprobado por una vasta mayoría de los asistentes (216 votos a favor), con solo cinco obispos en contra y tres abstenciones, cumpliendo con el requisito de los dos tercios necesario para emitir una declaración especial (la última vez fue en 2013, en respuesta al mandato federal sobre anticonceptivos).
El pronunciamiento se produce apenas una semana después de que el Papa León XIV (el primer estadounidense en ser máximo jerarca católico) criticara la política migratoria de la Administración Trump.
El USCCB concluyó su mensaje con un llamado al diálogo y a la reforma: “Nos oponemos a la deportación masiva e indiscriminada. Oramos por el fin del discurso deshumanizante y la violencia… [y] abogamos por establecer un diálogo y la aprobación de una reforma migratoria significativa.”
Diariorepublica.com



