Murió ‘El destripador de Yorkshire’ asesino en serie inglés, responsable de 13 homicidios a mujeres
El asesino en serie de origen inglés, Peter Sutcliffe, apodado por la prensa local como ‘El destripador de Yorshire’, ha muerto este viernes 13 de noviembre en un hospital de Reino Unido a los 74 años tras contraer el coronavirus, informa el Servicio Penitenciario de ese país, citado por AP.
Se reporta que Sutcliffe se había negado a recibir tratamiento por el Covid-19 y que padecía una serie de problemas de salud subyacentes. Por el momento, según la información suministrada por las autoridades, la causa exacta de su fallecimiento no ha sido confirmada y está siendo investigada por el cuerpo de forenses.
Sus crímenes y posterior captura
Sutcliffe sembró el pánico en el norte de Inglaterra en los años 70′. En 1981 fue condenado a cadena perpetua por asesinar a 13 mujeres e intentar matar a otras siete en el lustro de entre 1975 y 1980. Su apodo le vino dado por su siniestro ‘modus operandi’, que incluía la extracción de órganos y mutilaciones abdominales y genitales, era similar al del legendario asesino en serie «Jack El Destripador» cuyas acciones aterrorizaron a la localidad de Whitechapell en Londres durante 1888.
Debido a la incompetencia policial, Sutcliffe logró evadir el arresto en varias oportunidades, lo que le permitió continuar con sus crímenes a sangre fría contra mujeres jóvenes. Según la agencia, la persecución del Destripador fue una de las más difíciles en la historia de la policía británica y llevó a los agentes alrededor de 2,5 millones de horas de investigación para dar con la captura de este criminal.
Las víctimas mortales de Sutcliffe, la mayoría de ellas, las cuales eran prostitutas (algo más en común con el destripador del siglo XIX), fueron las siguientes:
- Wilma Mc Cann, 28 años (asesinada el 30 de octubre de 1975)
- Emily Jackson, 42 años (20 de enero de 1976)
- Irene Richardson, 28 años (5 de febrero de 1977)
- Patricia Atkinson, 32 años (23 de abril de 1977)
- Jayne Mac Donald, 16 años (26 de junio de 1977)
- Jean Jordan, 20 años (1 de octubre de 1977)
- Ivonne Pearson, 21 años (21 de enero de 1978)
- Helen Rytka, 18 años (31 de enero de 1978)
- Vera Milward, 40 años (10 de mayo de 1978)
- Josephine Whitaker, 19 años (4 de abril de 1979)
- Barbara Leach, 20 años (2 de septiembre de 1979)
- Margarita Paredes, 37 años (20 de agosto de 1980)
- Jacqueline Hill, 20 años (17 de noviembre de 1980)
Cuatro de esta lista, despojadas de su vida en el 77´siendo el año en donde más actuó con la culpabilidad de los homicidios a las féminas.
Finalmente, en enero de 1981, el asesino fue detenido en su vehículo cuando se disponía a quitar otra vida. Su aprehensión se produjo por pura casualidad: dos policías que estaban patrullando un barrio vieron el auto de Sutcliffe sospechosamente mal parado y decidieron identificar al conductor.
Mientras uno de los oficiales hablaba con la mujer que lo acompañaba, el otro decidió revisar las placas del carro. En ese momento, Sutcliffe pidió permiso para ‘ir al baño’ y logró esconder en una pila de hojas las herramientas con las que había planeado con premeditación matar a su víctima. Cuando los oficiales descubrieron placas falsas sobre las originales, Sutcliffe y su acompañante fueron llevados a una estación policial.
Poco después, la Policía regresó al lugar del vehículo estacionado para registrar la zona y encontraron un martillo y un cuchillo en los mismos arbustos adonde el asesino había ido con la excusa de hacer sus necesidades. Después de que los detectives informaran a Sutcliffe del hallazgo y lo increparan en interrogación, este terminó confesando plenamente su culpa y sus intenciones con la chica.
Esa razón, le dio luz verde a los uniformados para arrestarlo y posterior a esto, con base en el avance de los interrogatorios y la investigación, la Policía logró que el hombre confesara haber participado en las muertes de las víctimas citadas arriba, confesando las intenciones que tuvo al momento de someter a cada una y el posterior crimen por fecha, día, hora y año, determinando así que era el asesino serial que los departamentos de Policía británica tanto estaban buscando hasta cesar la sed de crímenes en el 81′.
Simón Sánchez
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