La Unión Europea (UE) y la Organización de Naciones Unidas (ONU) instaron a reducir las tensiones en Venezuela por los intentos de ingreso de la ayuda humanitaria enviada por varios países para paliar la crisis por falta de medicamentos y alimentos en el país.
Antonio Guterres, secretario general de la ONU, manifestó sentirse “conmocionado” producto de los recientes hechos violentos en Venezuela según un comunicado publicado por la ONU.
“El secretario general pide que se evite la violencia a toda costa y que no se utilice fuerza letal en ninguna circunstancia”, señaló el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, en un breve comunicado.
Según Dujarric, el diplomático portugués “está siguiendo con creciente preocupación la escalada de tensiones en Venezuela” y “le ha conmocionado y apenado la pérdida de vidas de civiles en el contexto de los acontecimientos de ayer”.
“El secretario general apela a la calma e insta a todos los actores a reducir las tensiones y hacer todo lo posible para evitar una mayor escalada”, añadió el portavoz.
Naciones Unidas reaccionó de esta forma a la violenta jornada vivida el pasado sábado en Venezuela, con enfrentamientos entre opositores y fuerzas gubernamentales en las fronteras con Colombia y Brasil, que dejaron varios muertos y decenas de heridos.
En las líneas divisorias con Brasil y Colombia la fuerza pública de Venezuela impidió que grupos de venezolanos realizaran un cordón humanitario con objeto de facilitar la entrada de la ayuda internacional cargada por camiones.
Por el lado europeo, tuvieron la misma posición ante lo ocurrido. La jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, en nombre de las 28 naciones que se han sumado a buscar una salida a la situación venezolana, expresó: “Hacemos un fuerte llamado a los organismos de seguridad y de cumplimiento de la ley para que muestren moderación, eviten el uso de la fuerza y permitan la entrada de ayuda”.
Mogherini dejó claro en un comunicado que en la UE “repudiamos el uso de grupos armados irregulares para intimidar a los civiles y legisladores que se han movilizado para distribuir la ayuda”.
La jefa de la diplomacia comunitaria lamentó que el empeoramiento de las condiciones de vida en Venezuela, asociado con la “crisis pluridimensional que golpea al país”, esté “impactando cada vez en más venezolanos”.
Según dijo, el rechazo del régimen del presidente, Nicolás Maduro, a “reconocer la emergencia humanitaria”, está llevando a una escalada de las tensiones. Mogherini indicó que hay “informes preocupantes” de actos de violencia y un “creciente número de víctimas”, en particular en las áreas fronterizas y entre la comunidad indígena Pemón.
La italiana recordó que la UE ya ha comprometido más de 60 millones de euros entre 2018 y 2019 en ayuda humanitaria y al desarrollo en Venezuela, enfocada en “aliviar el sufrimiento de los más vulnerables”.
En ese contexto, recordó el compromiso de la Unión con “ayudar a quienes lo necesiten durante el tiempo que sea necesario”, con reforzar la asistencia y trabajar en “mecanismos de coordinación” bajo el liderazgo de las agencias de la ONU relevantes, de acuerdo a “los principios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia”.
Mogherini señaló asimismo que los orígenes de la crisis en Venezuela son “políticos e institucionales”, por lo que “la solución sólo puede ser política”. “Reiteramos nuestro firme rechazo y condenamos la violencia y cualquier iniciativa que pueda debilitar más a la región”, subrayó.
La jefa del Servicio Europeo de Acción Exterior hizo hincapié en que el pueblo venezolano “ya ha sufrido mucho” y que ya es hora de que “se les deje decidir su futuro”.
“Renovamos firmemente nuestra llamado a la restauración de la democracia por medio de elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles”, enfatizó, y aseguró que la UE, a través del Grupo Internacional de Contacto que ha impulsado, “está dispuesta a respaldar este proceso”.
Via Panorama/Diario Republica
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