El presidente de Colombia, Gustavo Petro, utilizó su cuenta oficial en la plataforma X (anteriormente Twitter) en la noche del domingo para emitir un fuerte pronunciamiento geopolítico, asegurando que el verdadero motor detrás de la guerra en Ucrania y la potencial amenaza de invasión en Venezuela es el petróleo.
El mandatario criticó a quienes promueven una intervención militar en Caracas, al considerar que tal acción no solo es “irresponsable” y “apátrida”, sino que generaría consecuencias desastrosas para Colombia.
«Todos los que aplauden la invasión de Washington en Caracas solo desatan la quiebra de Ecopetrol y millones de venezolanos hermanos en nuestro territorio”, aseveró Petro.
El jefe de Estado colombiano enfatizó su posición de no apoyar al régimen de Nicolás Maduro, sino de buscar una “solución política y pacífica en Venezuela”, desmarcándose tajantemente de cualquier opción militar.
Riesgo Económico y Monopolio Árabe
Petro profundizó su argumento económico, señalando que la caída de los precios internacionales del petróleo, combinada con un potencial conflicto, resultaría en que el crudo se convierta en un “monopolio árabe”.
Este escenario, según el análisis del presidente, dejaría a Estados Unidos posicionado solo como líder del petróleo pesado, mientras que la petrolera estatal colombiana, Ecopetrol, registraría inminentes “números rojos”.
Defensa de la Multilateralidad y Rechazo a Bloqueos
En el mismo hilo de declaraciones, Petro se refirió a las recientes advertencias aéreas de Estados Unidos sobre la Región de Información de Vuelo de Maiquetía (Venezuela), instando a la normalización del tráfico aéreo.
El presidente declaró que los bloqueos a países son una práctica que “bloquea pueblos” y debe ser considerada un “crimen contra la humanidad”.
Finalmente, el mandatario colombiano hizo un llamado a respetar el principio de no intervención entre estados, destacando que la multilateralidad debe regir la gobernanza global en temas que afectan la vida en el planeta, como la crisis climática, la inteligencia artificial, los medicamentos fundamentales y las telecomunicaciones mundiales.
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