Froilán Barrios, del Movimiento Laborista, sostuvo que la sentencia “resta competencia a los tribunales laborales, los cuales podían tomar decisiones en materia de diatribas en elecciones sindicales; y al mismo tiempo ratifica la injerencia de Consejo Nacional Electoral (CNE) en las elecciones de sindicatos”.
Señaló que el TSJ ratifica “la violación, que de paso también está en la Constitución, del convenio 87 de la OIT, que impide que los poderes públicos intervengan en materia sindical”.
“Lo que debió hacer el TSJ es precisamente lo contrario: dictar la incompetencia del CNE en elecciones de sindicatos, porque el poder electoral obstruye los comicios sindicales”, añadió.
Según Barrios, la sentencia del TSJ que anula el artículo 406 de la Lottt otorga mayor discrecionalidad al Ejecutivo: “Cuando al patrono Estado no le convenga un artículo, entonces el TSJ lo modifica sin cumplir con un paso legal que debe salir de la Asamblea Nacional, la instancia natural facultada para pedir la reforma de una ley”.