El envenenamiento masivo de mascotas en Barquisimeto ha desatado una ola de indignación y movilización social. La Fiscalía 23 en Defensa Ambiental inició una investigación formal y citó a declarar a personal clave de un conjunto residencial, buscando sanciones ejemplares
La Fiscalía General de la República, a través de Tarek William Saab, anunció formalmente el domingo 12 de octubre la apertura de una investigación por el envenenamiento masivo de mascotas en Barquisimeto, estado Lara. Los hechos, calificados como un «grave daño al medio ambiente», se centran en denuncias ocurridas principalmente en la urbanización Patarata II y la avenida Andrés Eloy Blanco.
El caso tomó notoriedad el pasado 7 de octubre, cuando la muerte de un perro husky y un gato por la ingesta de veneno para ratas en el Conjunto Residencial Roca Amazonas generó una ola de reportes similares en diversas zonas de la capital larense. Vecinos han reportado, incluso, la intoxicación de personas por contacto con los animales o las sustancias.
Diligencias y citaciones clave
Para esclarecer las responsabilidades, la Fiscalía 23 en Defensa Ambiental ha dado un paso firme en las diligencias, citando a declarar a personal clave del condominio donde se reportaron los primeros casos:
El conserje.
Tres jardineros.
La administradora del condominio.
El Ministerio Público ha prometido actuar con «celeridad y firmeza» para aplicar castigos conforme a la ley y establecer un precedente legal contra el maltrato animal.
Crisis de conciencia y tejido social afectado
Organizaciones protectoras de animales y activistas han unido su voz al clamor popular, señalando que este crimen no solo afecta a los seres indefensos, sino que revela una grave crisis de conciencia ambiental y daña el tejido social.
«La violencia contra seres indefensos genera desconfianza y miedo», señalan los activistas, quienes consideran que la impunidad en este tipo de actos fomenta la desintegración comunitaria.
Mientras las autoridades avanzan en la investigación, los habitantes de Barquisimeto han respondido con vigilias, protestas y campañas de concientización. La meta de la comunidad y los protectores es clara: erradicar el maltrato animal, proteger la vida y asegurar que el envenenamiento masivo de mascotas en Lara no quede impune. La comunidad exige justicia, protección animal y sanciones ejemplares.
www.diariorepublica.com
