Nicolás Maduro, se trasladó en la tarde de este martes, al estado Aragua, para inaugurar el hospital del Sur Cipriano Castro.
Anunció que se habría logrado neutralizar casi todos los focos de violencia en el país.
En este acto repudió los actos realizados por los «facistas» que se encontraban en la sede del CNE en esa localidad, «he pedido paciencia para los manifestantes» pero deben ir presos todos los que agredan sedes del CNE y el CDI, dijo.
Igualmente llamó al pueblo oficialista al «cohetazo nacional», a las 8 de la noche de este martes y de los próximos días, para que las ollas opositoras no se escuchen.
«Que se escuche donde está el pueblo, que suene el himno, las canciones de Alí Primera y los cohetes», para que la burguesía sepa lo que es una manifestación popular» indicó.
Desestimó la movilización de los opositores de la noche del lunes, indicando que sólo vio en una esquina a tres personas con un afiche de Capriles, a las cuales se les acercó para abrazarles y decirles que los amaba.
Repudió nuevamente los actos de violencia vividos en el país, responsabilizando a Capriles Radonski, al mismo que dijo desconocer como gobernador de Miranda.
Luego de inaugurar el centro asistencial, en compañía de Tareck El Aissamí, solicitó al Ministro de Comunicación que en cadena nacional transmitan material de Capriles llamando a la violencia.
En la misma cadena nacional denunció que “Leopoldo López dijo que le dieramos cargos de Ministros o seguían con la violencia, yo lo mandé a lavarse ese partó”.
Herwin Godoy Briceño/Diario República