“Leopoldo López incitó de manera indirecta a la violencia”, así lo pudo determinar el periodista y lingüista, Mariano Alí, en el análisis sistémico que realizó a los 707 tuits que la Unidad de Criminalística de la Fiscalía General de la República le pidió que estudiara.
El jueves de la semana pasada participó en la audiencia que el Tribunal 28 de juicio, a cargo de la jueza Susana Barreiros, viene realizando al coordinador nacional del partido Voluntad Popular (VP), quien se encuentra detenido en la cárcel militar Ramo Verde desde 18 de febrero de 2014, cuando decidió entregarse a la justicia tras haber sido señalado de llamar a las protestas del 12 de febrero que cuatro meses después dejaron como resultado 43 muertos y más de 800 personas heridas en el país.
Alí, quien se desempeña como director de la emisora radial Yvke Mundial en Mérida, en la conversación que sostuvo, vía telefónica, con PANORAMA, contó que entró a las 4:00 de la tarde y su comparecencia terminó casi a las 4:30 de la madrugada del viernes.
Fue el 19 de marzo del 2014 cuando recibió una invitación, en calidad de colaborador, del Ministerio Público para realizar “un análisis pericial” a los mensajes emitidos por López a través de su cuenta en Twitter.
La Unidad de Criminalística del MP, le envió un CD con las capturas de pantalla de los mensajes emitidos por López entre el 1 de enero y el 18 de marzo del 2014, es decir, 77 días. En ese lapso escribió 707 tuits que representan 9,1 mensajes diarios, lo que deja claro que “es un político bastante activo en el ciberespacio”, determina Alí.
“El informe, de 126 páginas, que elaboré es un elemento complementario a otros que tiene la investigación”, acotó Alí, quien explicó que aplicó “el enfoque sistémico”.
“Fueron 34 días de investigación, un día después que recibí el CD. El informe contiene un análisis cuantitativo y cualitativo, sin utilizar textos marxistas y cubanos como lo quieren hacer ver los miembros de su defensa”, detalló.
“Utilicé conceptos como cibercultura planteados por Levi, ciberdemocracia, de Harto, ciberactivismo de Duvarte, en fin hay distintos conceptos que ninguno se pueden decir que son marxistas-leninistas como personas que hablan en este momento quienes ejercen funciones de Gobierno o quienes están en el campo de la docencia porque es una realidad que está allí, más aún el auge del internet”.
Recordó que según el Observatorio Estadístico de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) para el 2007 existían 7 millones de usuarios de internet en Venezuela, y en el 2012 se incrementó a 12 millones.
López para el año 2014, de acuerdo con la página Twitter en Venezuela, aparece como segundo político con mayor posicionamento en esa red social, en el ranking de todos los tuiteros del país ocupa la posición número 11, es decir, que es una persona que tiene peso dentro de la ‘tuitósfera’ y tenía más 2 millones 771 mil seguidores y él seguía a 338 mil y había publicado más de 13 mil mensajes.
En esos 77 días que evaluó, detectó como experto, que López “se dedicó a descalificar y desconocer los poderes del Estado como una estrategia de propaganda que tenía como objetivo la salida del presidente Nicolás Maduro y del resto de los poderes del Estado, manejando un discurso de forma maniquea, es decir, que hay un relato social concluido de la siguiente manera: hay una cúpula que ha secuestrado los poderes del Estado y al resto de la sociedad venezolana”.
“Él aplicó un discurso hegemónico porque no solo habla por todos los venezolanos, sino por todos los representantes de la oposición”, precisó.
“López plantea una narrativa dividida en dos planos: una cúpula que ha secuestrado los poderes del Estado y el resto del país que apoya la salida de esos poderes. Plantea la política como confrontación no como diálogo. En ninguno de sus tuits dice que es necesario dialogar con el Poder del Estado para buscarle una salida al país y en ningún momento reconoce la figura de Nicolás Maduro como Presidente de la República sino que lo descalifica, así como los poderes del Estado cuando lo llama asesino, torturador, delincuente (…)”.
Por otro lado, “utilizó frases contundentes que las colocó como consignas y las posicionó como etiquetas. ‘Estamos en el lado correcto de la historia’, allí muestra su carácter hegemógico, un maniqueo a la hora de manejar el discurso político, una posición que por consiguiente se puede entender que todo aquello que no esté conforme a su visión política está del lado incorrecto de la historia”.
También determinó que entre esos 707 mensajes que envió a través de @LeopoldoLopez solo en 18 hizo “un llamamiento a protestar en paz, en 31 menciona la palabra pacífica, la palabra calle en 169 veces, protesta 49 veces, dictadura 23 y en 33 oportunidades usó la palabra delincuente para referirse al Presidente de la República y demás integrantes de los poderes del Estado. En 68 veces construye la frase La Salida dentro de sus contenidos a través de Twitter”.
Otro de los aspectos que encontró el periodista en la revisión, es que el coordinador de Voluntad Popular en sus mensajes se presentó como “el vocero de todos los venezolanos” cuando publicó el 3 de febrero de 2014 lo siguiente: “Quedó claro que los venezolanos no están dispuestos a esperar seis años para salir de este Gobierno y terminar la crisis en la que nos encontramos”.
Con este mensaje además de afirmar, que se da como vocero de los venezolanos, también asume que “todos quieren la salida del presidente Maduro antes de los seis años a la vez que determina estados ánimo de toda la sociedad, y que “todos nos encontramos en crisis”.
“Él (López) puede hacer uso del artículo 57 de la Carta Magna, tomar la libertad de expresión como un derecho, pero con ese apartado también que debe asumir toda la responsabilidad por lo expresado, pero no está investido para hablar por la mayoría de los venezolanos como sí lo está el Presidente”.
La manipulación de la imagen del Presidente, el desconocimiento de todos los poderes del Estado, llamar a resolver los problemas de los venezolanos desde la calle, en un clima de polarización política, para Alí, “es una incitación indirecta a la violencia”.
El experto aclara que aunque en su estudio no determina de qué manera se incitó a la violencia, pues analizó al orador, al medio y al contexto del mensaje, solo pudo apreciar la reacción que tuvieron los seguidores de López al momento de hacerle retuit a sus mensajes en los momentos de mayor “crispación política”.
“Utilicé varias herramientas métricas web para explicar que cuando López enviaba un mensaje de no conciliar para nada con los representantes de los poderes del Estado, el no querer dialogar se generaba una comunidad digital donde interpreto que lo que buscaba era una rebelión en internet para emular hechos como los que ocurrieron en Egipto, Libia, Túnez que se llamó la Primavera Árabe”.
En opinión de Alí, la matriz principal del análisis que difundió López a través de internet es la siguiente: “Maduro, su Gobierno es corrupto, ineficaz, asesino, represor, es ilegítimo y controla junto a una cúpula los poderes de un Estado delincuente. En tal sentido, hay que activar la calle, pedir ayuda o intervención internacional, pues aplicó la sigla SOS Venezuela para lograr la salida antes de seis años de este desastre”.
“No soy quien para juzgarlo, pero le pido a todos los líderes bien sea del Gobierno o de la oposición es que se hagan responsables de lo que dicen, porque sus discursos son elementos causales en la población”, dijo.
Concluyó que Leopoldo López no ve adversarios políticos para el diálogo, ve enemigos políticos.
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