A punto de cumplirse mañana una semana del diálogo iniciado entre el Gobierno y la oposición en Caracas, ayer se escucharon las voces que llamaron a la coherencia entre las partes, ante el tono del lenguaje y las expectativas generadas rumbo al próximo viernes 11, cuando está prevista la próxima cita.
Para prevenir que los esfuerzos auspiciados por el Vaticano y los mediadores internacionales, ayer el secretario general de la Unasur, Ernesto Samper, hizo un exhorto a los integrantes del Gobierno y de la MUD. A través de su cuenta en Twitter, @ernestosamperp agradeció al representante de la Santa Sede, monseñor Claudio María Celli y a los expresidentes por la labor desempeñada en el proceso.
“Invito al Gobierno y #MUD a no crear falsas expectativas sobre los resultados del diálogo en el plazo inicial acordado hasta el 11 de noviembre” y en otro tuit: “Estamos construyendo espacios de confianza en el diálogo para luego abordar los temas fundamentales, esta semana avanzamos”.
También ayer, el enviado de Estados Unidos para apoyar el proceso, el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos Thomas Shannon, quien estuvo esta semana en el país, habló del tema, en rueda de prensa, en Washington.
“Las partes tienen que establecer algún tipo de agenda electoral que deje claro a los venezolanos que van a tener la oportunidad de votar”, indicó.
Shannon consideró que el diálogo “es frágil” e importante frente a la crisis y, a su juicio, esto representa la mejor oportunidad para lograr la paz y seguirá apoyándolo mientras sea viable.
“Es un proceso que está en fase delicada (…) Se encontrarán nuevamente el 11 de noviembre y es el último esfuerzo para negociar una solución pacífica y Venezuela se encuentre en un Estado donde el gobierno y oposición puedan medirse”, señaló el enviado.
No obstante, señaló que el hecho de lograr sentar en una mesa a ambas partes ya representa una avance considerable, “tiene la atención mundial y el apoyo mundial”. Al ser consultado sobre el status del referendo revocatorio solicitado contra el Presidente, Shannon respondió que no está “muerto”.
“En muchos sentidos, el Gobierno tiene la llave del éxito de este diálogo, porque son los que mantienen retenidos a los prisioneros (de la oposición) y tienen el control del proceso electoral”, manifestó Shannon.
Sin el diálogo, agregó, se producirá una “situación en la que el Gobierno venezolano y la oposición tendrán que medirse en uno con el otro con base en su capacidad de sacar a la gente a la calle”, y las movilizaciones populares que no van acompañadas de procesos de diálogo “son impredecibles y pueden ser muy peligrosas”.
Por su parte, ayer el presidente Nicolás Maduro aseguró que las mesas técnicas entre el Gobierno y la oposición “están trabajando”. “No aceptamos ultimátum. No vamos a aceptar que se paren de las mesas de diálogos. El futuro de Venezuela tiene que ser el diálogo, la convivencia, el respeto mutuo. Y las mesas de diálogo están trabajando”, destacó. “Ninguna conversación, ningún proceso de diálogo admiten ultimátum”, recalcó el Jefe del Estado, quien criticó la propuesta de la MUD de elecciones a “corto plazo” y reiteró que “ni con votos ni con balas volverán a Miraflores porque no nos ganarán en una elección”.
“Este pueblo no le va a entregar este país a un presidente de la oligarquía, de la derecha, es que no aguantan, no tienen proyecto, no tienen moral (…) Ni por las buenas ni por las malas”, dijo.
Entre tanto, la MUD emitió un comunicado en el que reiteró la necesidad de avanzar en el proceso de diálogo.
“La difícil situación que vive el país hace imperativo que el Gobierno se tome en serio la discusión que hemos empezado para exigir el derecho que tienen los venezolanos a elegir y votar”.
Señaló que “para continuar el camino del diálogo se requieren con urgencia resultados y gestos de parte del Gobierno, que evidencien su disposición de mantenerse en la mesa”. Asimismo, reiteró que “es importante cumplir lo acordado por ambas partes”.
“Nuestra disposición de diálogo no empezó ayer ni termina el 11 de este mes, pero es el gobierno quien puede lograr que esto no sea un frustración para Venezuela y la comunidad internacional. Toca al gobierno demostrar que va a asumir su responsabilidad”.
Asimismo, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, declaró ayer al respecto. Dijo que no se puede hablar de un inicio de “proceso de diálogo en Venezuela” hasta que no haya resultados “claros y contundentes” de las reuniones exploratorias.
“O el día 11 de noviembre hay resultados, o el gobierno mató el diálogo. Los venezolanos no podemos esperar meses para un cambio, queremos soluciones y resultados”, señaló.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com