El canciller venezolano, Yván Gil, se hizo eco de la grave preocupación manifestada por un grupo de expertos de Naciones Unidas (ONU) ante los bombardeos perpetrados por el Gobierno de EE.UU. contra pequeñas embarcaciones en el Caribe y, más recientemente, en el Pacífico. Los especialistas internacionales advirtieron que estos ataques podrían ser «ilegales», constituir «crímenes internacionales» y violar las normas fundamentales del derecho internacional.
El ministro venezolano compartió a través de su cuenta de Telegram el comunicado oficial de la ONU, donde los expertos señalan que los «ataques parecen ser asesinatos ilegales perpetrados por orden de un Gobierno, sin el debido proceso judicial o legal que permita el debido proceso ante la ley».
Exigencia de cese inmediato e investigación
El grupo de especialistas instó a EE.UU. a «detener de inmediato» los ataques contra buques en alta mar y exigieron «investigaciones exhaustivas e imparciales sobre todos los ataques ocurridos desde el 2 de septiembre de 2025, incluyendo garantías de verdad, justicia y reparaciones para las familias de las víctimas». Además, recordaron que «todos los Estados deben cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas».
Los especialistas consultados por el organismo multilateral son Morris Tidball Binz, relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias; Ben Saul, relator especial sobre la lucha contra el terrorismo y los derechos humanos; y George Katrougalos, experto independiente en la promoción de un orden internacional democrático y equitativo.
Acciones que no constituyen legítima defensa
Según la opinión de los expertos, los bombardeos que han dejado al menos 64 muertos y tres sobrevivientes, «no parecen haberse perpetrado en el marco de la legítima defensa nacional» ni en el contexto de «un conflicto armado internacional o no internacional».
La ONU destaca que estas acciones militares fueron contra personas que no «representaran una amenaza inminente para la vida», lo que «viola el derecho internacional fundamental de los derechos humanos que prohíbe la privación arbitraria de la vida».
Preocupación por crímenes internacionales: La naturaleza «repetida y sistemática» de los ataques suscita serias preocupaciones sobre la posible comisión de crímenes internacionales, dado que se han dirigido «contra embarcaciones pequeñas sin aparente intento de detener a los individuos ni de aportar pruebas concretas de por qué eran objetivos legítimos».
Frente a esta situación, la ONU instó a los miembros de las fuerzas armadas de EE.UU. a acatar estrictamente el derecho internacional y a «negarse a cumplir órdenes superiores cuando estas constituyan una violación manifiesta de la ley y puedan resultar en una grave violación de los derechos humanos, incluidas las ejecuciones extrajudiciales».
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