Jacinto Nicolás Fuentes Germán, Alias “Don Leo” y cabecilla de “Los Urabeños” , la segunda banda criminal más poderosa de ese país, fue detenido el miércoles último en Lima, luego de unos cuatro meses de seguimiento. Así lo informó Raúl Salazar, director de la Policía Nacional de Perú.
El arresto se cristalizó cuando el jefe del clan criminal buscaba contactos con organizaciones de narcotraficantes de ese país, entre otras cosas, con el propósito de adquirir armas y sellar alianzas para ampliar sus actividades de tráfico de drogas.
«Alias Don Leo» es conocido como la máquina de la muerte en el vecino país, pues es el responsable de al menos 800 asesinatos cometidos por “Los Urabeños” en especial en los municipios de Caucasica, Zaragoza, Tasara y Cáceres, en el departamento colombiano de Antioquia, entre los años 2009 y 2011. Así lo señala el reporte que sobre él remitiera la Policía colombiana a su similar peruana.
A la lista de muertes que se le atribuyen, se agregan otras seis en territorio peruano, según lo señala un informe de la Policía de ese país.
Adicionalmente, la fuerza pública colombiana lo señala como el mentalizador del cobro de extorsiones de hasta el 10% de las ganancias a los mineros, empresarios y comerciantes de las zonas en las cuales Los Urabeños tienen influencia, bajo la amenaza de asesinatos o desplazamientos forzados. En la actualidad, afronta dos órdenes de captura por el delito de concierto para delinquir.
Precisamente, los enclaves de las actividades ilícitas de la segunda banda criminal más temible de Colombia (la primera son Los Rastrojos) se hallan en el Bajo Cauca antioqueño. En particular, en los municipios de Caucasia, El Bagre, Zaragoza, Nechí y La Apartada. La Policía colombiana señaló que esa área resulta estratégica para esta bacrim, puesto que es un corredor importante para el transporte de insumos, armas y estupefacientes.
Fuentes Germán, igualmente, aparece como el gestor de alianzas de su grupo con el Frente 33 de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y con carteles mexicanos de la droga, en especial con Los Zetas. El objetivo: apuntalar sus negocios de narcotráfico y afirmarse como uno de los principales proveedores de cocaína de los barones aztecas.
El líder de Los Urabeños ya había sido detenido el 25 de julio del 2008 por agentes de la Dirección de Investigación Criminal de Colombia (Dijin). El arresto se produjo en el municipio de Envigado. Y recuperó su libertad en el 2011.
El capo colombiano ingresó de manera ilegal en el Perú, el pasado 21 de enero. Lo hizo por la frontera norte, con un documento de identidad perteneciente a uno de sus hermanos, según confirmó Salazar. En tanto, que la Policía colombiana detalló que, a finales del noviembre del año pasado, salió de su país y que también estuvo en el Ecuador.
Los Urabeños, con unos 1800 armados en sus filas, según los datos que maneja la Fiscalía General del Colombia, constituyen una organización neoparamilitar. Principalmente se dedican al narcotráfico y a la extorsión.
‘Don Leo’ fue la mano derecha del cabecilla paramilitar Carlos Mario Jiménez, alias ‘Macaco’, quien fue extraditado a EE.UU., en mayo del 2008, por los delitos de narcotráfico, lavado de activos y financiación del terrorismo. ‘Macaco’, condenado a 33 años de prisión por la Justicia estadounidense, fue la cabeza del Bloque Central Bolívar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los escuadrones de extrema derecha que libraron una guerra a muerte con las guerrillas de las FARC y del ELN.
Via El comercio