Un poderoso terremoto de magnitud 6,9 sacudió el centro de Filipinas, resultando en al menos una víctima mortal confirmada hasta el momento, según reportes de las autoridades locales. El incidente ha elevado la preocupación por posibles daños estructurales significativos y un número mayor de afectados en la región.
El sismo se produjo aproximadamente a las 22:00 hora local, con su epicentro localizado a tan solo 10 kilómetros (6 millas) bajo el agua, al oeste de Palompon, Filipinas, y en las proximidades de la ciudad de Bogo, en la provincia de Cebú, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Los modelos preliminares de sondeo sugieren que un terremoto de esta intensidad en la región tiene el potencial de causar víctimas y daños considerables a las estructuras deficientemente construidas.
Alerta de Tsunami y Evacuación
Ante la inminente amenaza, el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (PHIVOLCS) emitió una alerta de tsunami de nivel naranja para las provincias de Leyte, Biliran y Cebú. PHIVOLCS ha recomendado enfáticamente a la población que se mantenga alejada de las costas e insta a los residentes de la zona a evacuar inmediatamente tierra adentro.
Más de medio millón de personas sintieron fuertes temblores en las Islas Bisayas, que abarcan Cebú, Bilirán y Leyte en el centro de Filipinas, de acuerdo con las estimaciones del USGS. Los peores temblores se habrían sentido en las zonas del norte de las islas de Cebú y Leyte.
Daños y Labores de Rescate
Según el USGS, un temblor de esta magnitud puede provocar “daños considerables en estructuras deficientemente construidas o mal diseñadas”, así como “daños de leves a moderados en estructuras convencionales bien construidas”.
Las autoridades de Bogo han confirmado, a través de sus canales en redes sociales, que las labores de rescate se encuentran actualmente en curso para asistir a las posibles víctimas y evaluar la extensión total de los daños.
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