La propagación exponencial del brote de ébola que ha matado casi a 3.000 personas en África Occidental habría sido frenada en Guinea, dijo este jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS). Pero la falta de camas y la resistencia de algunos habitantes están provocando que la enfermedad se siga extendiendo en otras zonas, mientras los esfuerzos por poner en orden los datos muestran gradualmente que la epidemia es más mortal de lo que parecía.
La OMS dijo que al menos 2.917 personas han muerto por el ébola en los 6.263 casos registrados en los cinco países de África Occidental afectados por el peor brote de la enfermedad al 21 de septiembre. Frente a los datos anteriores de la OMS, las últimas cifras muestran que hubo 99 muertes más en Liberia desde el 17 de septiembre, pero solo cuatro más en Sierra Leona desde el 19 de septiembre y tres en Guinea desde el 20 de septiembre.
La proporción de casos en los últimos 21 días – que corresponden con el periodo de incubación del virus – también ha bajado en los tres países, lo que sugiere que podría estar frenándose la propagación de la enfermedad. «La tendencia al alza continúa en Sierra Leona y más probablemente en Liberia», dijo la OMS. «Pero la situación en Guinea, aunque es de gran preocupación parece haberse estabilizado», dijo.
La OMS dijo que Liberia tenía 315 camas libres para pacientes con ébola y las agencias de ayuda prometieron 440 más, pero el país necesita 1.550 camas más, que nadie se ha ofrecido a proporcionar de momento. En Sierra Leona, las 297 nuevas camas planeadas casi duplicarían la capacidad actual, pero son necesarias 532 más.
Con pocas camas y una enorme falta de experiencia, el esfuerzo por atajar el ébola ha llevado a levantar centros de cuidados y a formar a la población local, entre ellos a los 11.000 profesores de Liberia, para educar a la gente sobre cómo combatir la enfermedad. En Sierra Leona, el 75 por ciento de los hogares planeados ha sido visitado por «movilizadores sociales». Pero en algunas zonas de Guinea sigue habiendo resistencia a los esfuerzos, según la OMS.
«Por ejemplo hay informaciones de Fassankoni, Guinea, de que las comunidades han cortado carreteras para impedir la entrada a los equipos de respuesta», dijo. El riesgo de infección entre los trabajadores sanitarios es mucho más alto de lo que se pensaba. Un recuento muestra que 81 han muerto en Sierra Leona de los 113 que fueron infectados – una tasa de mortalidad del 72 por ciento, en lugar del 40 que se dijo anteriormente.
Sierra Leona aísla 3 áreas para detener el ébola
Sierra Leona restringió el jueves los desplazamientos a y dentro de otros tres «puntos calientes» de ébola donde viven 1,5 millones de personas, lo que supone que más de un tercio de la población del país está ahora bajo cuarentena.
El país es uno de los más afectados por el brote de ébola que está barriendo África occidental y que se cree que ha provocado la muerte de más de 2.900 personas, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicadas el jueves. La agencia dice que la situación en Sierra Leona sigue deteriorándose, fundamentalmente por un fuerte aumento de los casos en la capital, Freetown.
En un discurso a la nación, el presidente, Ernest Bai Koroma, ordenó el miércoles por la noche aislar los distritos de Puerto Loko, Bombali y Moyamba, lo que implica que sólo personas que ofrezcan servicios esenciales pueden entrar y circular por esas áreas. La OMS destacó también que en estas zonas se estaba viendo un aumento de los casos.
En otras áreas, incluyendo la capital, se pondrán las casas en cuarentena cuando se identifiquen casos de la enfermedad, dijo un comunicado del gobierno tras el anuncio.
El brote de ébola, el mayor de la historia, ha afectado también a Liberia y Guinea y se cree que más de 6.200 personas se han contagiado. Un paciente infectado cruzó a Senegal procedente de Guinea pero la enfermedad no parece haberse extendido allí. Nigeria registró 20 casos de la enfermedad y ocho fallecimientos después de que un hombre afectado viajase allí desde Liberia, pero el brote parece estar contenido allí también.
La escala sin precedentes del brote, así como su escala geográfica, han llevado a los gobiernos a imponer medidas severas, como acordonar pueblos o regiones enteras. La semana pasada, Sierra Leona impuso un toque de queda nacional de tres días, confinando a sus 6 millones de habitantes en sus casas mientras equipos sanitarios salían a la calle para buscar enfermos y educar a la gente sobre la enfermedad.
vía panorama/www.diariorepublica.com