
Hace unos días la Sonda Philae aterrizó en un cometa en el que en planes permanecería por algunos meses, realizando labores de investigación, para descubrir mas informacion acerca de los orígenes del sistema solar, indudablemente, fue un logro que llegase hasta su cometido, sin embargo desde éste viernes 14 de noviembre philae debía comenzar a transmitir datos.
Los científicos y los ingenieros de la sonda Philae están trabajando contrarreloj para obtener todos los datos científicos que el robot está tomando en el suelo del cometa 67P/Churyamov-Gerasimenko y, al mismo tiempo, buscar estrategias que puedan alargar un poco su vida en el lugar donde fue a parar tras el descenso del pasado miércoles.
Los expertos de la Agencia Europea del Espacio (ESA) explicaron que el problema radica en que cuando la sonda aterrizó en el cometa, rebotó y se posicionó en un precipicio, por lo que actualmente se mantiene en sombra.
La sonda llegó con energía suficiente para trabajar por dos días y medio, pero si no recibe la luz del sol para recargar su batería, Philae podría dejar de funcionar.
Para aprovechar al máximo el tiempo disponible, los responsables de la misión han decidido activar el perforador que lleva el robot, un dispositivo para hacer un agujero en el suelo (hasta 25 centímetros) y tomar muestras que se analizan a bordo, lo que puede dar datos cruciales sobre la composición del cometa.
Ya están en funcionamiento los 10 instrumentos científicos de la sonda, sin embargo no se sabrá mayor información hasta la próxima comunicación con Philae, que se realiza a través de la nave Rosetta, que se mantiene en órbita del cometa.
Vía Agencias / www.diariorepublica.com




