Barcelona se acercó hoy a los cuartos de final de la Champions League al vencer por 2-1 en el campo del Manchester City gracias a una gran primera parte y un «doblete» del uruguayo Luis Suárez.
El equipo azulgrana se exhibió antes del intermedio y dos goles de Suárez plasmaron su superioridad. La segunda parte fue más equilibrada y un tanto de Sergio Agüero mantiene al City con vida en la eliminatoria. Además, Lionel Messi tuvo la oportunidad de sentenciar, pero erró un penal en el tiempo de descuento.
El Barcelona dio un recital en la primera parte. Ante un equipo acobardado, entendió muy bien lo que debía hacer, que era manejar el balón y buscar desmarques profundos. Siempre encontró superioridad en mitad del campo y arriba sus delanteros estuvieron inspirados, con Suárez a la cabeza.
En cambio, el Manchester City fue una ruina durante 45 minutos. Ni jugó ni se defendió. Ante la sorpresa de sus propios hinchas, salió al campo con actitud contemplativa. Ninguna presión, ninguna intensidad. Fue como si aceptara su inferioridad desde el mismo comienzo del partido. Nadie se esperaba semejante respuesta del equipo local.
El Barcelona aceptó la invitación a jugar de su rival y manejó el balón con toda comodidad. Con Messi dirigiendo las operaciones ofensivas y Suárez ejecutando. Por eso, no extrañó que se adelantará cuando sólo se llevaban 16 minutos de partido.
La acción surgió de un balón llovido al área. El defensa belga Vincent Kompany actuó sin la contundencia exigida en el área y Suárez lo aprovechó para marcar con un disparo cruzado de zurda.
El Manchester City no se rebeló contra el gol. El Barcelona lo estaba pasando por encima, pero no se vislumbró ninguna reacción. Al contrario, el equipo azulgrana dobló la calidad de sus ataques.
El segundo tanto visitante ocurrió a los 31 minutos, como resultado de una gran jugada colectiva. Messi dirigió el plan de ataque, Jordi Alba envió un centro desde la izquierda y Suárez se adelantó a cinco defensores mal colocados para anotar su segundo gol. El marcador reflejaba la superioridad total de los visitantes.