El Real Madrid ganó 1-2 al Elche en un partido mediocre, el peor que ha jugado en toda la temporada, y se llevó la victoria con un tanto de penalti de Cristiano Ronaldo que protestaron los jugadores ilicitanos cuando ya se había cumplido el tiempo de descuento que decretó el colegiado Muñiz Fernández.
El equipo de Carlo Ancelotti no jugó a nada y mostró muchas carencias antes de enfrentarse el próximo sábado al Atlético de Madrid. Sufrió muchísimo ante un rival que consiguió empatar el choque en el minuto noventa con un tanto de Richmond Boakye y que mereció mucho más, sobre todo en una primera parte en la que fueron frenados por Diego López.
Agencias