Los Juegos Olímpicos de Invierno que se van a celebrar en Sochi podrían haber tenido una madrina de lujo, que iba a actuar como embajadora abriendo con sus canciones el evento deportivo. Podría haber sido pero no lo será, ya que Cher, la artista que había sido invitada, ha rechazado acudir.
Y lo ha hecho porque no piensa pisar un país, Rusia, que se ha convertido en un infierno para los homosexuales por la terrible homofobia de su gobierno y sus leyes. La cantante lo ha explicado en una entrevista, en donde ha dicho que dijo que no inmediatamente a la propuesta, al tiempo que ha preguntado de dónde sale todo este odio hacia los gays.
Se agradecen desde luego actos como este, que se suma al parecido de Wentworth Miller, pero lo cierto es que se nos queda un sabor agridulce cuando vemos que la presión internacional y mediática no sirve de nada, y Rusia sigue a lo suyo… Pero bueno, es un paso más que desde luego hay que agradecer a Cher.
Agencias