El Aguacero en Margarita fue un buen presagio para el Zulia.
Un invitado inesperado y persistente, la lluvia, se convirtió en el catalizador de una remontada electrizante que devolvió a las Águilas del Zulia a la cima de la tabla de posiciones de la temporada 2025-2026. En un dramático final en el Estadio Nueva Esparta, los rapaces voltearon el marcador en el noveno episodio para vencer a los Bravos de Margarita con un 4-2, en un juego que se detuvo por un largo aguacero.
La tranquilidad y dominio que los insulares habían exhibido durante ocho entradas se evaporó con la interrupción. El pitcheo margariteño, que había sido prácticamente indescifrable con solo cuatro imparables permitidos, vio cómo su ritmo se rompía abruptamente tras el parón de más de una hora. El abridor Abdiel Saldana y sus relevistas Werner Leal, Carlos Navas y José Quijada habían cumplido una labor magistral, preparando el terreno para el cerrador estelar, Claudio Custodio.
El giro fatal en el noveno
El dominicano Custodio subió al montículo para defender la ventaja de 2-1, enfrentando al siempre peligroso José Pirela. Pero la naturaleza tenía otros planes. Tras solo un par de lanzamientos, el juego se detuvo por la lluvia, y con ello, el guion cambió por completo.
Al reanudar, la pausa le pasó una costosa factura a Custodio. Pirela, el «Águila Negra», capitalizó el desajuste negociando un boleto que encendió la mecha. Con dos outs en la pizarra, Pirela avanzó hasta la segunda base gracias a un wild pitch del cerrador de Bravos, dejando la mesa servida para el héroe de la noche: Rayder Ascanio.
Ascanio, con la presión al límite, conectó un espectacular triple remolcador que no solo igualó el marcador a 2-2, sino que inyectó una dosis de adrenalina al dugout zuliano.
“Estaba muy enfocado. Cuando estaba la lona puesta por la lluvia, yo estaba pensando en lo que iba a pasar y se me dieron las cosas”, declaró Ascanio a la periodista Sabrina Paz, de 1Baseball Network. “Estoy contento porque tenía un plan y gracias a Dios lo pude ejecutar”, comentó el campocorto.
La ofensiva rapaz no se detuvo allí. José Godoy recibió un pelotazo para prolongar la entrada, y el novato Jaison Chourio siguió con un infield hit al shortstop que permitió a Ascanio anotar la carrera de la ventaja, el 3-2. El golpe de gracia lo propinó el siempre oportuno Alí Castillo, quien ligó un sencillo impulsor para traer a Godoy al plato y sellar el 4-2 definitivo.
Regreso a la cima con coraje
El cerrador Silvino Bracho tuvo un cierre angustioso, permitiendo que dos bateadores de Bravos se embasaran, pero logró dominar la situación para asegurar el rescate. Fue un triunfo de garra, de esos que definen a un equipo contendiente y que demuestran que, en el béisbol, el juego no termina hasta el out 27.
Gracias a este heroico triunfo, las Águilas del Zulia recuperan la soñada primera posición. Ambos equipos se enfrentan nuevamente hoy domingo en el mismo escenario, el Estadio Nueva Esparta de Porlamar desde las 5:00 de la tarde.
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