El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes que entablará una conversación con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, en un futuro próximo, asegurando tener un mensaje “muy específico que decir” al líder del país caribeño. El anuncio se produce en un momento de máxima tensión entre Washington y Caracas, marcada por acciones militares y designaciones de terrorismo.
“Hablaré con él en un futuro no muy lejano”, declaró Trump durante una entrevista con Brian Kilmeade de Fox News. El mandatario estadounidense fue enfático al negarse a revelar el contenido del mensaje, pero subrayó la importancia de la futura comunicación: “No puedo decirte qué, pero tengo algo muy específico que decir”. Trump añadió que Estados Unidos va a estar “muy involucrado” en la situación de Venezuela.
Apertura al diálogo en Caracas
Este anuncio consolida la posibilidad de un diálogo directo, que ya había sido anticipada por Trump a principios de semana, al sugerir que “probablemente” hablaría con el mandatario venezolano “en algún momento”. La respuesta desde Caracas fue inmediata y favorable.
El mismo lunes por la noche, el presidente Maduro se mostró receptivo, afirmando que estaría abierto a conversar con su par estadounidense. “Cualquiera que quiera hablar con Venezuela lo hará cara a cara”, aseguró Maduro en la televisión estatal. El líder venezolano hizo un llamado a la diplomacia: “Reafirmamos que solo a través de la diplomacia deben los países y gobiernos libres entenderse, y solo a través del diálogo deben buscar puntos en común en temas de interés mutuo”. Insistió en que el diálogo es el camino hacia la paz, argumentando que “esa paz no tiene alternativa”.
Escalada de tensión militar y sanciones
El acercamiento verbal se produce en un telón de fondo de creciente confrontación en la región. Las Fuerzas Armadas estadounidenses han intensificado la presencia militar en el Caribe y el Pacífico, desplegando más de una decena de buques de guerra y 15.000 soldados como parte de la operación denominada “Lanza del Sur”.
Esta operación ha incluido ataques contra embarcaciones que, según el Pentágono, estarían involucradas en el tráfico de drogas, resultando en un saldo de 22 botes hundidos y 83 muertos.
La tensión se agrava con la inminente designación, que entra en vigencia el 24 de noviembre, del llamado Cartel de los Soles como Organización Terrorista Extranjera (FTO). Si bien esta designación autoriza sanciones financieras y diplomáticas, como la congelación de activos, Washington la ha utilizado previamente como antesala o justificación para acciones militares. Observadores internacionales señalan que la amenaza de una confrontación se ha convertido en una realidad palpable en las últimas semanas.
El inminente diálogo entre Trump y Maduro podría representar un punto de inflexión en la deteriorada relación bilateral o, por el contrario, ratificar la posición de firmeza de Estados Unidos en la crisis venezolana. Todos los ojos están puestos en la naturaleza de ese mensaje «muy específico» que el presidente Trump ha prometido comunicar a su homólogo.
www.diariorepublica.com
