La aerolínea colombiana de bajo costo, Wingo, anunció la suspensión preventiva de sus vuelos en la ruta Bogotá-Caracas para este jueves 4 y viernes 5 de diciembre de 2025. La decisión sigue la misma medida adoptada por su casa matriz, la panameña Copa Airlines, en un contexto marcado por la elevada tensión geopolítica en la región y la advertencia aérea emitida por Estados Unidos sobre el espacio venezolano.
En un comunicado oficial, Wingo explicó que la suspensión se debe a «intermitencias presentadas» el pasado miércoles 3 de diciembre «en una de las señales de navegación durante su vuelo hacia Caracas.»
«Por lo anterior, tomó la decisión preventiva de suspender temporalmente los vuelos desde y hacia esta ciudad los jueves 4 y viernes 5 de diciembre de 2025,» indicó la aerolínea.
Seguridad Operacional y Compromiso
Al igual que Copa Airlines, que ya había notificado la interrupción de sus servicios a la capital venezolana para las mismas fechas, Wingo enfatizó que la situación de navegación «en ningún momento comprometió la seguridad operacional.»
La aerolínea de bajo costo reiteró su «compromiso con la seguridad y el bienestar de sus pasajeros y tripulaciones.»
Conectividad Aérea en Crisis
Esta nueva cancelación agrava la crisis de conectividad aérea que vive el país. La situación se desencadenó tras el aviso de la Administración Federal de Aviación (FAA) de EE. UU. el 21 de noviembre, que instó a las aerolíneas a «extremar la precaución» al sobrevolar Venezuela y el sur del Caribe, citando una «situación potencialmente peligrosa.»
La advertencia de la FAA se produjo en medio del despliegue militar que el Gobierno de Donald Trump ordenó en aguas cercanas a Venezuela bajo el pretexto de combatir el narcotráfico, aunque el gobierno de Nicolás Maduro lo interpreta como una maniobra para forzar su salida del poder.
Repercusiones para Aerolíneas Internacionales
La ola de cancelaciones y el clima de hostilidad generaron una respuesta del Gobierno venezolano. El Ministerio de Transporte y el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (Inac) revocaron la concesión de vuelo a varias aerolíneas, incluyendo a Iberia, TAP, Avianca, Latam Colombia, Turkish Airlines y Gol, acusándolas de «sumarse a las acciones de terrorismo» promovidas por Estados Unidos.
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