El presidente electo de EE UU, Joe Biden, festejó este viernes 8 de enero que el mandatario saliente, Donald Trump, no vaya a asistir a su investidura presidencial, al asegurar que es «una de las pocas cosas» en las que ambos están de acuerdo, aunque confió en que el vicepresidente saliente Mike Pence, sí tome presencia en el lugar de la investidura.
Por otra parte, evitó pronunciarse sobre un posible juicio político al mandatario saliente Donald Trump, por su incitación del asalto al Capitolio, al asegurar que «depende del Congreso» tomar esa decisión. «Lo que el Congreso decide hacer es que ellos decidan», admitió el demócrata.
A su vez, Biden informó en un mensaje televisado que pensó durante «mucho, mucho tiempo que el presidente Trump no era apto para ocupar el cargo. Por eso me postulé. Mi trabajo ahora en 12 días, si Dios quiere, será ser presidente de Estados Unidos».
El presidente electo alegó que su prioridad en este momento es prepararse para su nueva administración y que está enfocado en tres preocupaciones: el virus, la vacuna y el crecimiento económico del país norteño.
Cabe recordar que, más temprano la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi, comunico a los congresistas de ambos partidos que iniciará el proceso de «impeachment» (juicio político) contra Donald Trump si el mandatario no dimite de forma «inmediata».
Simón Sánchez
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