En un golpe contundente contra las organizaciones criminales transnacionales, la Policía Judicial y la Marina de Portugal lograron interceptar un narcosubmarino que transportaba 1.7 toneladas de cocaína en aguas del Océano Atlántico. La exitosa «Operación El Dorado» es resultado de una estrecha coordinación internacional con agencias de Estados Unidos y el Reino Unido.
La embarcación, de tipo semi-sumergible, tenía como destino final la Península Ibérica y es considerada un método de contrabando de alta sofisticación, diseñado para evadir la detección en alta mar.
Cuatro Detenidos y Coordinación Internacional
A bordo del sumergible se encontraban cuatro tripulantes de nacionalidad venezolana, quienes fueron detenidos inmediatamente. Los capturados fueron trasladados a los tribunales de instrucción criminal en Ponta Delgada, en la isla de São Miguel, dentro del archipiélago de las Azores.
La operación se gestó gracias a la información compartida por el Maritime Analysis and Operations Centre – Narcotics (MAOC-N), un organismo europeo con sede en Lisboa dedicado a coordinar la lucha contra el narcotráfico marítimo.
La Policía Judicial destacó la colaboración esencial de la National Crime Agency (Reino Unido), la Drug Enforcement Administration (DEA) y la Joint Interagency Task Force South (EE. UU.), ratificando que la investigación continúa abierta para desmantelar la estructura de la red criminal.
Una Amenaza Recurrente
Esta incautación marca el segundo narcosubmarino que las autoridades portuguesas logran interceptar en lo que va del año, subrayando el creciente uso de esta vía por parte del crimen organizado. En marzo pasado, una operación similar resultó en la incautación de más de 6.5 toneladas de cocaína.
Los cuerpos de seguridad reafirman su compromiso de utilizar la inteligencia compartida para proteger las costas europeas de las rutas marítimas del narcotráfico.
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