Joaquín Guzmán Loera, apodado «El Chapo» era el reo número 3578 del Centro Federal de Readaptación Social número 1 El Altiplano, en México tenía privilegios autorizados por el Comité Técnico Interdisciplinario del penal, como el contar con una pequeña pantalla de televisión LCD, un radio, un par extra de calzado y ropa adicional para el frío.
Además podría recibir a sus abogados hasta el límite del horario permitido de las seis de la tarde, trascendió que su defensor entraba hasta en cuatro ocasiones al día a la zona de locutorios.
Fuentes del Gabinete de Seguridad del gobierno federal mexicano explicaron que no existe irregularidad alguna por la presencia de una pantalla, debido a que había cumplido con las condiciones del Comité Técnico.
El aparato es únicamente un receptor de televisión de señal abierta, que no tiene posibilidad de transmisión de datos vía internet, lo que de cualquier forma estaría imposibilitado debido a los bloqueadores de señal instalados en el penal.
A los internos también se les permite el ingreso de pequeños aparatos de radio para señal de AM y FM, que no tengan la capacidad de transmisión de señal.
Pueden ingresar libros, un cuaderno, un lápiz de madera, un cobertor extra al proporcionado por el penal, enseres personales para limpieza personal y correspondencia.
En el caso de «El Chapo» Guzmán, en su celda se encontró una muda extra de ropa, un par de calzado, además de las sandalias que se quitó antes de escapar por el suelo de la regadera.
Guzmán tenía la posibilidad de decidir si sus alimentos los tomaba en la celda o en el área del comedor, instalado a un lado del Centro de Tratamientos Especiales, en donde se ubica la que fue su celda, el módulo 20, del pasillo 2.
Vía UN/www.diariorepublica.com