El presidente Juan Manuel Santos anunció el jueves una serie de medidas para hacer frente a un paro de camioneros que lleva 38 días y que ha ocasionado desabastecimiento de alimentos y combustible en gran parte del país.
El jefe de Estado dijo que ha ordenado incautar los vehículos que participan en los bloqueos de carreteras y cancelar las licencias a las empresas y conductores que participan de la manifestación.
«No voy a permitir que los precios de los alimentos para los colombianos, el huevo, la carne, el arroz, se suban de forma permanente por cuenta de este paro», dijo Santos en la casa presidencial.
Asimismo ordenó aumentar en 50.000 militares y policías el pie de fuerza para proteger las vías y acompañar las caravanas de camioneros que se resisten a la huelga.
El conflicto estalló hace más de un mes cuando un grupo de transportistas acusó al gobierno de incumplir una serie de acuerdos a los que habían llegado en 2014 cuando hubo una protesta similar. Los camioneros reclaman un mejor precio para los fletes y la disminución en los precios de los combustibles.
Según el mandatario algunos de los líderes del paro persiguen intereses personales en detrimento de la mayoría de los camioneros. «No se puede tolerar un cartel del transporte que fija los precios y prohíbe la competencia», agregó.
Luis Orlando Ramírez, presidente de la asociación de transportadores de carga dijo en diálogo con RCN que «hemos presentado documentos para racionalizar el parque automotor, para actualizar los costos, para que se nos reconozcan y lo hemos hecho a través de cientos de reuniones que tampoco han sido escuchadas».
La huelga inició de forma pacífica pero en la última semana los camioneros empezaron a bloquear vías, lanzarles piedras a sus compañeros que pretendían llevar la carga hasta los mercados y enfrentarse con la fuerza pública especialmente en el central departamento de Boyacá, donde el martes murió una persona en los incidentes.
«Frente a estos comportamientos ilegales no hay ni habrá tolerancia por parte del gobierno nacional», enfatizó Santos.
Alfonso Medrano, vicepresidente de la Asociación Colombiana de Camioneros, dijo a The Associated Press que él y sus compañeros esperan que funcionarios del Ministerio de Transporte los convoquen de nuevo a la mesa de negociación.
Hasta el martes las pérdidas por la huelga ascendían a unos 375 millones de dólares, según los cálculos de la Asociación Nacional de Empresas Transportadoras de Carga por Carretera. En Colombia un galón de gasolina cuesta entre 2,6 dólares y tres dólares.
El paro es impulsado por la Asociación de Camioneros, gremio que representa los intereses de los transportadores de carga del país. Sin embargo, algunos conductores no están de acuerdo y han seguido trabajando.
El ministro de Defensa Luis Carlos Villegas dijo en rueda de prensa que «hemos tenido dificultades para conseguir camiones y conductores adicionales, pero ha aparecido un nuevo recurso para enfrentar esta emergencia con 6.400 conductores».
Vía Panorama / www.diariorepublica.com