Tanto el envío de ayuda humanitaria como las telecomunicaciones, necesarias para conocer la situación en Gaza, estuvieron bloqueadas en las últimas 24 horas en la franja a causa de la falta de combustible, indicó la ONU en su informe diario sobre la crisis.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas subraya que el actual corte de telecomunicaciones, cuarto que se produce desde el inicio de hostilidades y primero causado por la falta de combustible, ha impedido actualizar gran parte de sus datos diarios sobre situación sanitaria, de alimentos y otros aspectos.
Por tercer día consecutivo, además, no han entrado suministros humanitarios porque la falta de combustible impide recibir y distribuir esta ayuda a la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), necesaria tanto para el transporte como para coordinar mediante las telecomunicaciones, subraya el informe.
Ello se produce en un momento en el que según el Programa Mundial de Alimentos (PMA) aumentan los casos de deshidratación y malnutrición, y se corre el riesgo de una auténtica hambruna si los envíos de alimentos no pueden proseguir en el paso de Rafah, entre Egipto y Gaza.
Con todo, UNRWA señaló que las autoridades israelíes le han informado de que a partir de hoy sábado permitirán la entrada en Gaza de 60.000 litros de combustible diario desde Egipto, con los que la agencia espera poder conducir al menos un 37 % de las operaciones humanitarias, incluida la distribución de alimentos.
También indicó que esta entrada de combustible podría alimentar los generadores de hospitales, en un momento en el que tres de cada cuatro en Gaza no pueden operar por falta de energía, siendo algunos de ellos el principal campo de batalla de los enfrentamientos entre Israel y Hamás.
El informe indicó que el viernes, por segundo día consecutivo, fuerzas israelíes que incluyeron tanques rodearon el hospital Al Ahli, en la capital gazatí, y también como ha ocurrido desde mediados de semana siguen los combates en Al Shifa, centro hospitalario donde según las autoridades palestinas han muerto 40 pacientes por los enfrentamientos y la falta de combustible desde el 11 de noviembre.
Desde ese día, a causa de la ocupación de buena parte del norte de Gaza por el ejército israelí y la falta de datos desde muchos hospitales, el Ministerio de Salud gazatí no ha podido actualizar sus cifras de muertos en el conflicto, que se mantienen en 11.000 (4.500 de ellas niños) con más de 27.000 heridos.
Entre los fallecidos hay 71 desplazados internos, 45 periodistas palestinos, 198 médicos y 103 trabajadores de la UNRWA, recuerda el informe.
Éste calcula que 800.000 palestinos, aproximadamente dos tercios de la población que había en el norte de Gaza antes del conflicto, permanecen en esa zona asediada por las fuerzas israelíes, pese a días de evacuaciones ordenadas por Israel a través de la carretera Saladino, principal arteria de la franja de norte a sur.
Vía efe/www.diariorepublica.com