La canciller alemana, Angela Merkel, y el principal candidato de la oposición, el socialdemócrata Peer Steinbrück, depositaron ya sus votos en sus respectivos colegios electorales en unas elecciones seguidas con gran expectativa por el resto de Europa.
La mandataria alemana acudió andando hacia las 13:30 p.m a su colegio electoral en el centro de la capital alemana acompañada de su marido, Joachim Sauer, reseñó DPA.
Ataviada con un pantalón negro y una chaqueta marrón depositó su voto en las urnas con la esperanza de poder continuar en el poder otros cuatro años más.
Steinbrück, por su parte, hizo lo propio en su colegio electoral de Bonn, a donde acudió junto a su esposa Gertrud. El principal rival de Merkel aseguró haber dormido bien y haber disfrutado de la campaña electoral.
Los colegios electorales abrieron hoy sus puertas en toda Alemania para que casi 62 millones de ciudadanos con derecho a voto elijan al próximo canciller en unas elecciones seguidas con enorme expectativa por el resto de Europa.
A las 14:00 horas la participación había alcanzado un 41,4 por ciento, sin contar los votos por correo. En las últimas elecciones generales de Alemania de 2009, la participación a esa hora se situó en un 36,1 por ciento y al final del día se situó en un 70,8 por ciento.
Según los últimos sondeos, la canciller cristianodemócrata (CDU) Angela Merkel ganará un tercer mandato consecutivo hasta 2017, aunque no está claro con quién tendrá que aliarse para formar gobierno.
Merkel quiere reeditar su actual coalición de centroderecha con los liberales del FDP. Pero algunos sondeos indican que los dos partidos no sumarán mayoría propia frente a la oposición de centroizquierda. En ese caso, la opción más probable sería que Merkel repitiera una «gran coalición» con los socialdemócratas de Peer Steinbrück (SPD) como la de su primer gobierno (2005-2009).
El otro enigma electoral que se resolverá hoy es si el nuevo partido euroescéptico Alternativa para Alemania (AfD) llega al 5 por ciento necesario para ingresar en el Parlamento. La entrada de una fuerza que pide «la disolución progresiva de la eurozona» en el Parlamento de la primera potencia europea enviaría una señal preocupante al continente.
Merkel cerró su campaña este sábado insistiendo en defender su política de «solidaridad con condiciones» para los países en crisis y rechazando instrumentos como los eurobonos. La canciller prometió «continuidad» a una Alemania que crece con solidez y mantiene el desempleo en 6,8 por ciento.
Si la economía centró la campaña de Merkel, Steinbrück intentó imponer temas con más carga social como la creación de un salario mínimo nacional o el aumento de impuestos para los más pudientes.
Unos 61,8 millones de alemanes están llamados a las urnas. Los colegios electorales cierran a las 18:00 horas. Inmediatamente después se conocerán los primeros sondeos a pie de urna. El resultado oficial se sabrá bien entrada la noche.
A partir de entonces comenzarán negociaciones para formar una coalición de gobierno, que dependiendo de lo ajustado del resultado podrían extenderse durante semanas.
De forma paralela a las elecciones generales celebrará comicios regionales el estado federado de Hesse, rico núcleo industrial en el centro del país actualmente gobernado por una coalición de CDU y liberales como la que preside Merkel a nivel nacional.
Agencias