Una nueva tormenta de nieve ha afectado considerablemente a Colorado, Kansas, Oklahoma, Texas y Missouri. La Tormenta avanza hacia el este del país con fuertes ráfagas de viento.
Este lunes cayeron más de dos pies de nieve en las montañas de los alrededores de Denver, en Colorado, y se cierne amenazadoramente con fuertes vientos sobre otros estados del medio oeste y el centro de Estados Unidos.
La helada ha obligado a cerrar el tráfico en autopistas de Texas y Oklahoma sólo días después de que otra tormenta gélida tapizó con una gruesa alfombra de nieves ambos estados.
El mal tiempo, que también tiene tiritando de frío a Kansas y Missouri, viene acompañado de precipitaciones que esta tarde estaban cubriendo de nieve el noroeste de Texas a un ritmo de dos o tres pulgadas por hora.
El servicio meteorológico en la ciudad texana de Amarillo colocó un anuncio en su página web en el que calificó de “histórica” la tormenta y pidió a los residentes que no se aventuraran a salir a la calle. “No viajen”, les advirtió.
Los partes del tiempo alertaron de ráfagas de viento heladas de hasta 100 kilómetros por hora, la carretera interestatal 40 que comunica Amarillo con Oklahoma ha quedado intransitable, y la Guardia Nacional ha sido movilizada en Texas para ayudar a los choferes varados por la nieve.
Agencias