
Un poderoso terremoto de magnitud 8,8 sacudió la costa oriental de Rusia este miércoles, generando una serie de alertas de tsunami en países a lo largo del Pacífico, desde Japón y Hawái hasta Alaska, Canadá, México, China, Filipinas y Nueva Zelanda. El epicentro se ubicó cerca de la península de Kamchatka, y las consecuencias han sido inmediatas y generalizadas.
Las autoridades rusas declararon el estado de emergencia en las Islas Kuriles y en la ciudad de Petropavlovsk-Kamchatsky, después de que olas de tsunami de hasta seis metros inundaran el puerto de Severo-Kurilsk. En la costa de Kamchatka, las olas habrían alcanzado entre diez y 15 metros en zonas poco pobladas. Varias personas resultaron heridas durante las evacuaciones de emergencia, aunque no se han reportado víctimas mortales. Por el momento, Rusia ha levantado la alerta de tsunami en la península de Kamchatka.
Diariorepublica.com/euronews



