
El más reciente Monitor País Hinterlaces revela un dato contundente: el 93% de los venezolanos rechaza una intervención militar extranjera. La encuesta, realizada a 1.200 personas en todo el país, muestra que solo el 5% estaría de acuerdo con una acción militar externa, mientras que el 2% no respondió. Este resultado tiene un margen de error del 3%.
Un consenso nacional por la paz y la soberanía
Este rechazo mayoritario y transversal a la sociedad refleja una clara tendencia en la opinión pública venezolana. Independientemente de sus diferencias políticas, la población coincide en que los problemas de la nación deben ser resueltos por los propios venezolanos, sin injerencia de potencias extranjeras.
Este amplio consenso en defensa de la paz y la soberanía es particularmente significativo en un país caracterizado por una profunda polarización. La cifra, prácticamente unánime, muestra que la sociedad venezolana se opone firmemente a cualquier opción bélica impulsada desde el exterior.
El contexto geopolítico y los antecedentes históricos
El estudio se publica en un momento de crecientes tensiones internacionales. A pesar de las recientes acusaciones de Washington contra Venezuela y la presencia de buques militares en la región, la opinión pública venezolana ha enviado un mensaje inequívoco: no existe legitimidad social para una intervención extranjera.
Los resultados también se ven influenciados por la memoria histórica. Los venezolanos recuerdan los efectos devastadores de intervenciones militares en países como Irak o Libia, así como episodios internos como el golpe de Estado de 2002. Estos antecedentes refuerzan la convicción de que la soberanía nacional es un valor no negociable.
La opinión pública como factor estratégico
El resultado de este estudio no es solo un dato estadístico, sino un factor estratégico clave. Un rechazo masivo a la injerencia extranjera actúa como un sólido muro de contención contra cualquier intento de legitimar acciones militares externas. La encuesta demuestra que incluso los sectores más críticos con el gobierno coinciden en que la solución a los problemas del país pasa por el diálogo, la negociación y el voto, y nunca por la imposición de potencias foráneas.
Vía El Universal/Diario República.com



