
La situación educativa en Venezuela es precaria y se agrava con el tiempo. El sector educativo enfrenta un gran desafío debido a la disminución de matrículas, la migración de docentes y la falta de interés de las nuevas generaciones en esta carrera. Estos factores ponen en riesgo el futuro de la educación en el país.
Radiografía de la crisis
Expertos de diversas instituciones universitarias del país, como la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), la Universidad Metropolitana (UNIMET) y la Universidad de Los Andes (ULA), han ofrecido sus perspectivas sobre esta problemática. Sus análisis, aunque a veces contrastantes, dibujan un panorama complejo y preocupante:
Reducción drástica de matrículas: Celsa Afonso, directora de la Escuela de Educación de la UCAB, ha denunciado una alarmante reducción del 76% en la matrícula y del 88% en el número de graduandos desde el año 2008. Afonso explica que esta baja responde directamente a la pérdida del atractivo de la carrera docente. Las menciones más afectadas son Física, Matemáticas y Ciencias Sociales.
Migración de docentes: Todos los expertos coinciden en que la migración masiva de profesores e investigadores cualificados es una de las principales causas de la crisis. La decana de la Facultad de Educación de la ULA, Mery López de Cordero, afirma que esta diáspora ha dejado un «gran déficit» de profesores en todas las menciones, a excepción de Lenguas Modernas y Educación Física.
Perspectivas esperanzadoras (con cautela): Aunque la mayoría de las instituciones académicas reportan una crisis, el director de la Escuela de Educación de la UNIMET, Julio Salas, ofrece una visión algo diferente. Salas reporta un aumento en las matrículas de su institución, de 200 a 240 estudiantes en un año, y atribuye este logro a la implementación de su innovador programa de Gerencia Educativa. Sin embargo, también advierte sobre la preocupante fuga de talentos, particularmente de investigadores, lo que debilita el sistema educativo en general.
Posibles soluciones y un futuro incierto
Los expertos concuerdan en que es urgente que el gobierno venezolano tome medidas significativas para revertir esta situación. Celsa Afonso y Mery López de Cordero resaltan que, sin una mejora salarial y un reconocimiento social para los docentes, será imposible revertir esta tendencia.
«Si no se toman medidas urgentes, será muy difícil motivar a las nuevas generaciones. Muchos talentos ya se han ido a otros países», señala López de Cordero. Afonso añade que sin mejoras salariales no habrá recuperación, ya que los jóvenes prefieren otras carreras. Por su parte, Salas mantiene la esperanza, pero reconoce que el panorama es complicado y que la migración de profesionales y la reducción de la investigación son grandes obstáculos para el desarrollo del sistema.
En definitiva, las proyecciones de la UNESCO sobre la escasez de docentes a nivel mundial para el año 2030 ya se manifiestan en Venezuela, lo que pone de manifiesto una urgente necesidad de acción para garantizar un futuro para las nuevas generaciones.
Vía Foco Informativo/Diario República.com



