Este martes volvieron las protestas a la ciudad de San Cristóbal. Cerca del mediodía, dos unidades de transporte fueron secuestradas: una en la Universidad Nacional Experimental del Táchira (Unet), y la otra en la “sede vieja” de la Universidad Católica del Táchira (Ucat).
La unidad secuestrada en la Unet fue de la línea Tusca, la cual fue instalada por los manifestantes como una barricada, para impedir el paso hacia las instalaciones de la universidad. Al poco rato, efectivos de la Guardia Nacional llegaron al lugar, y lograron rescatar el autobús sin daños.
En la Ucat, la unidad de transporte corrió con la misma suerte, pues después de permanecer un tiempo en poder de quienes manifestaban, estos la dejaron ir, sin causar daños materiales, ni tampoco al conductor. Posteriormente se registraron enfrentamientos con efectivos policiales, dejando algunos estudiantes heridos de perdigón y metras.
En las adyacencias de ambas universidades, permanecían los escombros y la arena que habían dejado el día anterior camiones volteo, para limitar el paso hacia el lugar de los cuerpos de seguridad.
Dueños de una venta de autos cercana a la Católica, denunciaron que encapuchados lanzaron una bomba Molotov a su negocio, quemando parte de la fachada. Según reportaron, habrían mantenido asediado al personal que labora allí, los cuales lograron salir minutos después sin haber sufrido ninguna agresión.
Una vez más algunas líneas de transporte público cesaron sus funciones, ante el temor de ser quemadas o secuestradas, como ha ocurrido desde el inicio de las protestas en Táchira el pasado 4 de febrero.
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