
Maduro: “Malas noticias para quienes esperan que renunciemos a nuestros derechos históricos”
El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, lanzó una firme advertencia a la comunidad internacional y a la oposición extremista, declarando la integridad territorial y la soberanía nacional como derechos “irrenunciables” y “constitucionalmente consagrados” que su Gobierno defenderá con toda la fuerza del Estado.
En una reflexión divulgada a través de su canal de Telegram, el mandatario fue enfático: “La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e independiente. Irrevocablemente. No lo puede revocar nadie sobre cielo y tierra”. Este mensaje es una respuesta directa a las presiones externas, especialmente de Estados Unidos, y a los sectores de la oposición que, según Maduro, «quieren que Venezuela renuncie a sus derechos históricos […] y se convierta en una colonia”.
El dignatario fue categórico al dirigirse a quienes esperan un repliegue: “Les tenemos malas noticias a quienes esperan que renunciemos a nuestros derechos históricos, a la independencia, a la libertad y a la soberanía. La integridad territorial es un derecho irrenunciable, explícito en nuestra carta magna bajo la doctrina de Simón Bolívar». Subrayó que la defensa de la independencia, la libertad, la soberanía, la inmunidad y la autodeterminación nacional no es una opción, sino un “mandato jurado” que el Gobierno seguirá «haciendo prevalecer» y defenderá «con el poder de la nación”.
Escalada de agresiones y bloqueo naval impuesto por EE. UU.
Las declaraciones de Maduro se producen en un contexto de creciente escalada de agresiones por parte de Estados Unidos. Recientemente, la administración estadounidense ordenó el “bloqueo total y completo” de entrada y salida de Venezuela de buques petroleros sancionados, una acción que el Ejecutivo venezolano ha calificado de «robo», «acto de piratería» y una violación flagrante del derecho internacional. Esta medida, sumada al amplio despliegue militar en el mar Caribe y la incautación de buques con crudo venezolano, busca, según Caracas, imponer un bloqueo militar naval con el objetivo de “robar” los recursos naturales del país.
El Gobierno venezolano reiteró su soberanía total sobre sus riquezas, alertando que el presidente estadounidense, Donald Trump, busca imponer estas medidas de forma “absolutamente irracional” y asumiendo que los recursos venezolanos “son de su propiedad”.
Llamado de alerta a la comunidad internacional
Ante la gravedad de la situación, el canciller venezolano, Yván Gil, informó a la prensa sobre una misiva enviada por el presidente Maduro a los principales jefes de Estado y de Gobierno de América Latina, el Caribe y a los miembros de las Naciones Unidas. El objetivo es alertar sobre las consecuencias de una “escalada de agresiones de extrema gravedad” por parte de Washington, cuyos efectos, según el mandatario, «trascienden» a Venezuela y «amenazan con desestabilizar a toda la región y al sistema internacional en su conjunto».
El texto de la misiva advierte sobre los peligros del silencio ante la agresión, trazando un paralelismo histórico: «La historia nos ha enseñado que el silencio frente a la agresión tiene consecuencias devastadoras… Hoy, salvando las diferencias históricas, la lógica es la misma: si se tolera el uso unilateral de la fuerza, la ejecución de civiles, la piratería y el saqueo de recursos de estados soberanos, el mundo se encamina hacia un escenario de confrontación global de proporciones imprevisibles».
Respaldo internacional y estrategia diplomática
En el frente diplomático, el canciller Gil anunció el importante respaldo de la Federación Rusa. Tras una conversación con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, el ministro ruso afirmó que Rusia brindará “toda su cooperación y apoyo a Venezuela en contra del bloqueo”, manifestando total respaldo a las acciones emprendidas por el país caribeño en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU.
Venezuela refuerza así su estrategia de defensa soberana, combinando una postura interna de firmeza «irrenunciable» con la movilización diplomática en foros multilaterales para condenar las medidas coercitivas unilaterales y la tentativa de bloqueo que pone en riesgo la paz regional y global.
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