
A tan solo un año y nueve meses de su desembarco en la Casa Rosada, Javier Milei sufrió su más dura derrota en las elecciones locales de la provincia de Buenos Aires, a manos del peronismo-K al cual pretendía destronar para siempre de la política argentina.
En una elección que el propio Presidente se encargó de nacionalizar, el electorado bonaerense mayoritario le dio la espalda. La retórica de Milei de dejar atrás “el infierno kirchnerista” y “poner el último clavo al ataúd del kirchnerismo” no tuvo eco. Al contrario, la derrota fue aplastante, por más de 13 puntos en toda la Provincia.
El peronismo-K ganó en 6 de las 8 Secciones Electorales en que se dividió el comicio. Lejos del sueño mileísta de pintar “de violeta” la Provincia -lejos también de los augurios de los encuestadores, que en el mejor de los casos daban una módica ventaja a Fuerza Patria, cuando no un triunfo a LLA que llevó a Milei a hablar de “empate técnico”-, Buenos Aires se pintó este domingo prácticamente de celeste. Fuerza Patria ganó de manera aplastante la Tercera -casi 54% a 28%-, pero también la Primera por más de 10 puntos. Ambas secciones aglutinan casi 10 millones de votos de los 14 millones de electores habilitados (71%)
Fuerza Patria también ganó en la Cuarta -el noroeste provincial, después de veinte años-, en la Segunda -también partidos de fuerte impronta rural en el noroeste- así como también la Octava -que es La Plata, la capital bonaerense-. La Libertad Avanza, que incluyó a un fagocitado PRO en sus filas, pudo contar triunfos en la Quinta -con el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, ganándole otra vez el duelo a la camporista Fernanda Raverta-, y en la Sexta.
De cara a las legislativas nacionales del 26 de octubre, que renovarán la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado, los resultados de este domingo obligan al Gobierno de Milei a replantear su estrategia. Por cómo se dio el calendario con el desdoblamiento provincial del nacional, un límite al margen de maniobra es que faltan 50 días para la elección nacional, y las alianzas y listas de cargos ya han sido presentadas.
La derrota de Milei y su impacto
El resultado agrava para el Gobierno un frente financiero que ya viene complicado, con intervenciones sobre el mercado que lo llevaron a vender US$ 650 millones de dólares en la última rueda del viernes. La falta de sustento al “modelo Milei” en el principal distrito electoral del país, que quedó al desnudo este domingo, tendrá un impacto adicional en el plano económico que podrá empezar a medirse con la apertura de los mercados este lunes.
En términos estrictos, este domingo se votó para renovar la mitad de las dos cámaras de la Legislatura provincial, un millar de concejales en los 135 municipios bonaerenses, y consejeros escolares.
Pero Milei fue quien propuso este comicio casi como un plebiscito de su gestión nacional. Este domingo, pasadas las 22.05 se subió al escenario de un búnker libertario lleno de caras largas y preocupación. La puesta en escena incluyó a ministros, a su hermana Karina Milei -principal responsable del armado electoral- y la llamativa presencia del asesor Santiago Caputo.
Milei aceptó los resultados de la “clara derrota”, y ensayó una dudosa explicación acerca del “aparato peronista” cuya “eficiencia” habría sido decisiva. Si bien habló de “autocrítica” y “errores”, no puso en duda el ajuste y sus efectos sobre el electorado. Al contrario, ratificó el rumbo económico, y prometió que se “va a redoblar”.
Diariorepublica.com/Clarín



