El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha expresado una contundente crítica a la política de Estados Unidos en la región, manifestando que Washington ha transformado el Caribe en un área de «colonización y agresión.» Esta declaración surge a raíz de la reciente denuncia hecha por Venezuela sobre la detección de aviones de combate de las Fuerzas Armadas estadounidenses operando a 75 kilómetros de su costa.
La denuncia venezolana, presentada este jueves por el ministro de Relaciones Exteriores, Yván Gil, señala la «incursión ilegal» de estas aeronaves como una violación del Derecho Internacional y de la Convención sobre Aviación Civil Internacional (Chicago). Según el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino, cinco cazas fueron detectados operando cerca de Maiquetía.
Rechazo a la Militarización y Anuncio de Denuncia Internacional
A través de su cuenta en la red social X, el jefe de Estado colombiano comunicó: «Han convertido el Caribe de zona de paz como se acordó con los mismos Estados Unidos en zona de agresión y colonización. Las consecuencias de estos hechos serán negativas en el corto plazo y en el largo plazo de la historia.»
Por su parte, el Gobierno de Caracas ha anunciado que presentará una denuncia formal ante el Consejo de Seguridad de la ONU, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), buscando que se implementen medidas para prevenir la repetición de estos actos que considera ilegales y peligrosos.
Contraste con Operaciones Militares Colombianas
En el mismo mensaje, el presidente Petro contrastó las acciones estadounidenses con la labor del Ejército colombiano, refiriendo que este jueves se produjeron «siete afectaciones al grupo armado de (Iván) ‘Mordisco’ en el Amazonas sin necesidad de agresiones diplomáticas.»
Esta alusión al Estado Mayor Central (EMC), una disidencia de las extintas FARC-EP, se interpreta como una respuesta a la postura de la Administración estadounidense, la cual ha justificado legalmente ataques perpetrados en septiembre contra embarcaciones en el Caribe bajo el argumento de estar en guerra contra organizaciones del narcotráfico consideradas terroristas.
Las declaraciones del presidente Petro refuerzan la preocupación regional sobre la militarización del Caribe y la escalada de tensiones en la zona.
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