Una larga jornada de protestas que se extendió por más de 10 horas en algunos puntos, con motivo de la actividad denominada por la oposición como “trancazo“, dejó la ciudad de Maracaibo como nunca antes, parcialmente trancada y cubierta de basura , escombros , arena, partes de vehículos, árboles completos, alcantarillas robadas, semáforos dañados y transporte público a media máquina
Como en una etapa de postguerra, los ciudadanos amanecieron sorteando los obstáculos y enfrentándose a la nueva cara de la ciudad.
Cada jornada de trancazo ha sumado nuevos factores para considerar. En primer lugar, hay que destacar que no solo se trata de vías obstruidas por un tiempo determinado, sino de toneladas de desechos sólidos esparcidos por las principales vías del norte de la ciudad. Un ejemplo de esto es la avenida 8 Santa Rita con Universidad, El Naranjal y Milagro Norte donde es casi imposible transitar a pie por el olor y la insalubridad que desprenden. Algunas han sido quemas y a esta hora todavía desprende humo putrefacto.
En algunos de estos puntos los escombros aún permanecen allí, por lo que los conductores deben hacer toda clase de maniobras para poder circular por un solo canal. En algunos casos se ven en el conflicto de quién quiere pasar primero y quién debe ceder el paso.
En otros sectores como el 18 de Octubre, Belloso, Canta Claro, La Paragua, Fuerzas Armadas y Tierra Negra se han valido de recursos diversos para trancar, como por ejemplo cerros gigantes de arena, troncos y árboles completos, rejas de alcantarillas y portones, tan pesados que son imposibles de remover.
El caso de las alcantarillas es más crítico, tanto en El Naranjal como en la avenida 5 del 18 de Octubre se robaron un tramo de la reja por lo que quedó totalmente al descubierto. Usuarios han colocado más escombros como precaución a los conductores, sin embargo más de uno cae en sus profundidades.
La anarquía vial reinó en Maracaibo
Haciendo un recorrido por la zona norte, se pudo evidenciar que al menos 2 de cada 3 semáforos está dañado, esto ha implantado la ley del más fuerte en puntos críticos. La avenida Guajira con prolongación Circunvalación 2 vivió un caos tras formarse grandes nudos en la intersección.
De igual manera, hay secuelas del trancazo que deben ser revisadas, por ejemplo las que generan anarquía vial. En horas de la mañana al parecer las normas de tránsito se olvidaron, las vueltas en U, saltos de islas, conductores “tragándose la flecha” y reventando las cornetas para obligar a otros a pasarse en rojo los pocos semáforos que quedan activos fue la orden del día, estas conductas suelen ser normales si una vía está obstruida por una protesta, ya que no hay más remedio que retroceder, pero dan pie a que se implementen en todo momento, como sucedía hoy.
Así mismo, se evidencia en la gente un clima de predisposición y alarma, los conductores apenas ven a un vehículo dar vuelta en U en alguna intersección, otros suponen que está trancado, aunque no lo esté, provocando el colapso en la vía sin alguna razón aparente.
Aunque las calles presentaban tráfico lento debido a las barricadas que aún permanecen levantadas y las grandes cantidades de basura, los ciudadanos debían continuar con su rutina, por lo que una gran masa de gente se movilizó desde tempranas horas de este martes ante un transporte público que salió a laborar muy reservadamente. Largas colas se veían en las paradas de autobús a la espera de algún vehículo para transportarse.
Los comercios abrieron una vez constataron que no habría trancón este martes, por lo que se evidenciaron algunos locales cerrados y otros laborando a media máquina.
Vía NAD/www.diariorepublica.com