La evolución de ‘Kikilino’, cuya cirugía se prolongó durante nueve horas, ha sido sostenida. Con su sonrisa conmueve a quienes han seguido de cerca sus avances.
Su papá Carlitos Arjona compartió en su Instagram @carlitos_arjona esta imagen de su hijito sonriente.
También publicaron esta foto en la cuenta @uncorazonparakike
«Una imagen habla más que mil palabras. Así esta nuestro Kike ahorita. Otra vez con su gran sonrisa. Increíble. Hoy hace una semana ya de que sucediera lo más anhelado e increíble de mi vida. 27 de septiembre fecha inolvidable. El otro cumpleaños de Kikilino! Kikito con tu fuerza y ganas de vivir me has demostrado y enseñado muchísimo, que el peor miedo es el miedo a intentarlo, que no hay barrera que contenga la fe, que con amor se vence cualquier obstáculo y que la esperanza es lo último que se pierde. Haré todo lo que tenga que hacer para mantener esa sonrisota y esa mirada que tanto adoro. Defenderé tus ilusiones y te ayudaré a perseguir todos tus sueños, para que así seas un niño feliz por siempre”, expresó el papá de Kike.
“Gracias por tanto mi guerrero, mi ejemplo de valor y luz de mi vida. Fuerza bebé aquí estamos todos contigo apoyándote y cuidándote día y noche para que todo siga evolucionando bien.Te amo. #uncorazonparakike”, dijo.
El pasado sábado ejecutaron el trasplante.
Transcurridas 3 horas de la intervención, los especialistas le notificaron a la familia: “Todo va como lo planeamos”.
A las 5:30 pm (hora local), ya el pequeño Carlos Henrique tenía su nuevo corazón. Así lo confirmó su abuelo materno, Francisco Álvarez, quien precisó que habló con su hija Frances, quien le dio la buena noticia. “Ya le colocaron el corazoncito a Kike. Está todavía en pabellón, solo que están monitoreando cómo funciona y reacciona el nuevo órgano, que hasta ahora está muy bien”.
En el centro de salud, además de Carlos, estaban Frances Álvarez, mamá del niño, y las abuelas: María Elena de Arjona y Gaby de Álvarez, esta última se fue mes y medio después que la pareja partió de Maracaibo, en junio.
La intervención estaba prevista para la madrugada del sábado, pero fue pospuesta. Más de 10 especialistas participaron en la cirugía.
El corazón de Kike llegó al centro de salud, en la ciudad de Houston, la tarde del pasado viernes cuando sus padres recibieron la llamada del milagro: había un donante para Kike.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com