Sus propios tíos la mataron. Una niña de tres años murió producto de una golpiza que le propinaron mientras estaba de vacaciones en casa de su familia, informaron autoridades. El crimen ocurrió el pasado viernes.
Los padres de Génesis del Carmen Valilla Araujo la enviaron a casa de sus tíos hace una semana en el sector Los Cortijos, en el municipio San Francisco. La niña residía con su familia en El Vigía, estado Mérida.
Los parientes llevaron a la niña tarde del pasado viernes a la emergencia pediátrica del Hospital General del Sur. Informaron a los especialistas de guardia que la infante presentaba un cuadro de fiebre y malestar general, que había vomitado y tenía diarrea.
La tía también aseguró en el centro asistencial que la bebé estaba jugando junto con otros niños y se había golpeado la cabeza.
La niña fue examinada por los galenos quienes observaron que presentaba en distintas partes de su cuerpecito varios hematomas y contusiones. A las 5:20 de la tarde, la niña falleció.
El cadáver fue llevado a la morgue del HGS, Los funcionarios del Cuerpo de investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) deciden abrir una averiguación por el crimen.
A la infante le practicaron la necropsia de ley y arrojó que la menor de edad había muerto a causa de los golpes que presentaba.
Los sabuesos de la policía científica llamaron a declarar en la delegación estadal del cuerpo detectivesco a los tíos. En el interrogatorio los parientes confesaron haber golpeado a la niña y quedaron detenidos.
Los victimarios contaron a los detectives que los progenitores de la infante viajaron con ella desde Mérida y se la entregaron para que pasara un mes de vacaciones en su casa. Confesaron que la bebé fue golpeada en reiteradas ocasiones en varias partes del cuerpo como “forma de castigo porque no paraba de llorar”.
Autoridades del cuerpo detectivesco informaron que la pareja será presentada hoy ante los tribunales.
Hasta la tarde de ayer, a la medicatura forense de la Universidad del Zulia no se había acercado parientes a reclamar el cuerpo de la bebé.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com