Ayer a las 7.30 de la noche, el cuerpo de Isabel del Valle López, de 67 años, fue localizado sin vida dentro de su habitación.
Presuntamente, varios sujetos que robaron su residencia no se conformaron con llevarse las pertenecías, sino que antes de irse la mataron.
La dama estaba boca arriba, desnuda, amarrada y amordazada con un tirro que cubría su boca y parte de su nariz. La mujer que vivía sola, fue estrangulada y esperan por los resultados de los exámenes forenses para determinar si fue violada.
Ya el cuerpo se estaba descomponiendo.La escena fue descubierta por la hija mayor de la familia. La joven tras varios intentos fallidos de comunicarse con su progenitora, decidió ir hasta su casa y corroborar que todo estuviese bien.
Manifestó tener un mal presentimiento, pero confiaba en que su mamá estaría fuera de peligro. Al llegar y abrir la puerta de la casa el temor se hizo realidad, el desorden le advirtió sobre la tragedia.
El hecho ocurrió en la calle 1, casa 1 de Campo Grande, residencias pertenecientes a la industria petrolera en la localidad, ubicada a poco menos de una cuadra del comando de la Guardia Nacional que custodia las instalaciones.
Los vecinos curiosos aseguraron no escuchar ni ver nada, pero denunciaron el alto índice de inseguridad que se vive en el lugar.
«Siempre sabemos de familias que son sometidas para robarlas, pero nunca habían llegado a estos extremos», dijo con asombro uno de los presentes.
Al sitio llegaron funcionarios castrenses, de la Policía municipal y estadal, quienes resguardaron la escena del hecho, mientras llegaba la Policía científica para levantar el cadáver. Un boquete en la pared del fondo y la separación de las láminas de zinc en el teco de la vivienda sirvieron de entrada para los homicidas.
Una gorra oscura olvidada en el lugar es la única pista que se tiene.»Esto no es verdad. Esto no nos está pasando a nosotros», fueron algunas de las frases que se escuchaban entre los llantos desesperantes de la familia, que poco a poco se acercaba para verificar los rumores.
Exigieron justicia.
Sospechoso…El desorden de todo el lugar impidió saber a ciencia cierta los objetos robados y complicaron la búsqueda de evidencias criminalísticas para dar con el paradero de los asesinos.
Entre las versiones ofrecidas por los familiares figuró la extraña presencia de un sujeto que llego al campo y ofrecía sus servicios como limpia monte o pintor.
La dama lo contrató los primeros días de Diciembre y el hombre permaneció por varios días en el lugar pintando las paredes.
Según los vecinos era conocido como el «Hinner» y había salido recientemente de un centro de rehabilitación por el consumo de drogas.
«Es lo único extraño que paso en la casa. No se puede asegurar nada, pero queremos que de haga justicia». Isabel del Valle López, de 67 años. Era jubilada de Petróleos de Venezuela (Pdvsa). Trabajó varias décadas en las clínicas de la estatal. Tenía dos hijas. El año pasado le nacieron los únicos dos nietos que tenía.
Vía Diario La Verdad